He aprendido a agradecer todo lo que pasa en mi vida, durante el día, las cosas buenas y las cosas no tan buenas, las dificultades, las mejoras, lo inesperado, la falta, la dicha, la s oportunidades... Si uno agradece se le multiplican las bendiciones.

Solía quejarme de todo de mis carencias, de lo que quería y no tengo, hasta que aprendí a aceptar lo que soy lo que tengo y ver cuán bendecida soy con mi parte.

No puedo tener el control de todas las cosas, a veces siento que cargo… Continuar