La sociedad y los medios de comunicación, nos han vendido la idea de que TODAS las madres, deben sentirse felices y extasiadas cuando acaban de tener un bebé. Pero, ¿qué pasa cuando regresas del hospital y NO sientes la alegría y la emoción?
La Depresión Posparto puede afectar a cerca del 20% de las mujeres que dan a luz. Afortunadamente con el apoyo adecuado, es temporal y se puede alcanzar una completa recuperación.
Estos son algunas sugerencias que puedes llevar a cabo para apoyar a tu pareja, hija, hermana, nieta, sobrina, amiga, etc., si está atravesando por esta difícil situación:
1) Identificar los síntomas: la DPP, NO ES LO MISMO que el Baby Blues (o Tristeza Posparto). Este último desaparece por sí sólo durante las 2 o 3 primeras semanas, y NO requiere atención médica o psicológica.
En la DPP se puede presentar: tristeza, ansiedad, insomnio, alteración en los patrones de sueño/alimentación, aislamiento, baja autoestima, dificultad para vincularse con el bebé o sentimientos ambivalentes, y miedo de cuidarlo, entre otros.
2) Escuchar y hablar abiertamente sobre la enfermedad: especialmente las emociones “negativas”, como el miedo, la ansiedad, las dudas, los autorreproches o los sentimientos de culpa.
3) NO DUDAR DE LA SERIEDAD de los síntomas: en la mayoría de los casos, es indispensable el apoyo profesional. La mujer necesita más que una actitud positiva, más que “echarle ganas”, más que descansar y acoplarse a su nueva vida, o creer que todo se va a mejorar en poco tiempo.
Si no se atiende, la DPP puede convertirse en un padecimiento crónico y/o tener graves consecuencias para la mujer, el bebé, la pareja y la familia.
4) NO dejar a la mujer sola/abandonada: es importante que la mujer se sienta acompañada, contenida y que puede contar con un familiar, ser querido, enfermera o cuidadora en momentos de desesperación y crisis.
5) Ayudarla a buscar apoyo profesional: y si es necesario, acompañarla a sus citas. Es MUY IMPORTANTE, encontrar un terapeuta, psicólogo o psiquiatra que tenga experiencia en trastornos del estado de ánimo en el posparto.
6) Ser PACIENTE: es importante tratar de entender el padecimiento y a la mujer, sin JUZGARLA o CRITICARLA.
Es VITAL poder brindarla amor, cariño, apoyo, comprensión, y sobre todo, hacerla sentir que a pesar de todo, siempre estaremos ahí para apoyarla y NO la abandonaremos.
7) Ofrecer ayuda: para cocinar, limpiar la casa, cuidar al bebé para que descanse, llevarla a algún lugar, acompañarla dentro o fuera de la casa, etc.
8) Estar al pendiente: de su salud física, emocional y espiritual hasta que haya alcanzado la recuperación.
http://autumnaspens.com/2013/08/23/how-to-support-someone-suffering-from-postpartum-depression/
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