"Hagas lo que hagas a la mitad de la gente no le vas a gustar…"
Yo no creo esto, esta frase es solo un concepto mediocre que no te sirve para nada, pero que al ponerlo en tu mente se activa y por lo tanto va a haber gente que no te quiere pero porque tu lo crees no porque no te quiera. Que manera de gastar la vida. Mejor piensa y cree que toda la gente te quiere, y ya veras que es así, aunque para los realistas (pesimistas) esto no sea verdad.
Hace unos días hablaba por teléfono con una amiga que conozco desde que éramos niñas y me sorprendió escuchar todos los problemas que tiene siendo ella una de las mujeres más trabajadoras y con iniciativa que conozco.
Mi amiga fue criada para tener una vida de trabajo duro y sacrificio. Ella da la vida por todos, sus padres, sus hermanos, sus hijos, sobrinos, etc., pero su problema más grande es que vive resentida porque siempre esta esperando que los demás se porten bien con ella, y cuando no lo hacen se siente mal y reacciona en contra de las personas. Como ella me lo dijo, "ya me cansé de mendigar el amor de los demás". Eso es exactamente lo que ha hecho hasta ahora, mendigar el amor de los demás.
Mi amiga es una de millones de personas que viven (sobreviven) su vida para los demás dependiendo siempre de ellos. Personas como mi amiga no tienen vida propia por lo tanto no se aman a ellas mismas, no se valoran y no se respetan. Este es el resultado del Medio Ambiente en el que vivimos. Un medio ambiente lleno de lucha, de sacrificio, donde abunda la desvalorización de la mujer. Donde la mujer ha sido programada para servir a los demás y aguantar todo lo que toque vivir.
Es triste ver a una gran mujer súper trabajadora que desea con todo su corazón ser feliz y tener una vida digna pero controlada por programas de victima y de sacrificio. Cuando una persona no se ama a si misma es muy común que viva dependiendo de lo que dicen y piensan los demás es por eso que vive sirviendo y haciendo favores a los demás para "ganarse" el amor que ella necesita y no tiene. Pero cuando a las personas que les hace los favores no le agradecen o se portan bien con ella, entonces reclama y reacciona dañando las relaciones.
Es vital aprender a amarnos a nosotros mismos y preguntarnos por que es tan importante para nosotros la atención y el aprecio de los demás. Es vital aprender a dar por el placer de dar sin esperar nada a cambio. En el caso de mi amiga, hasta ha llegado a reclamarles a sus hijos todo lo que ha hecho por ellos, cuando los hijos no pidieron venir al mundo. Hasta cierto punto ha hecho un buen trabajo con sus hijos por que son personas respetuosas y agradecidas, sin embargo cuando no actúan como ella espera, se molesta y empieza a asumir cosas que le hacen daño y la hacen reaccionar.
Todo está dentro de nosotros. Todo a nuestro alredor es una creación nuestra por lo tanto si algo no me gusta, es el momento de cambiarlo en mi no en los demás. Aunque la sociedad y nuestro Medio Ambiente nos han enseñado a enfocarnos en los demás, y querer resolver nuestra vida mediante nuestras circunstancias y exterior, eso jamás será posible si no cambiamos nuestro interior; es decir nuestras creencias, palabras, pensamientos y emociones.
Cuando Yo aprenda a amarme a mi mismo, a valorarme y respetarme, los demás a mi alrededor harán lo mismo. Cuando Yo aprenda a definir y a asumir lo que quiero de cada situación, circunstancias y personas, lo voy a poder crear y convertirlo en mi realidad. Los demás son "mis sirvientes", si, se oye mal (programación), sin embargo se refiere a que ellos reciben nuestras instrucciones y solamente actúan y se manifiestan mediante las ordenes recibidas (percibidas) de mi. Estas órdenes son dadas por los programas y conceptos que yo tengo y por lo regular son dadas inconscientemente, es decir, automáticas sin darnos cuenta.
La única manera de dar instrucciones precisas y crear la realidad que yo quiero es despertando y estando consciente para definir y saber perfectamente lo que quiero de cada situación y persona y asumir (fe) que ya esta hecho. Todo proveniente del amor puro e incondicional que tengo dentro de mí.
Es hora de dejar de asumir cosas que no nos sirven y de asumir nuestra responsabilidad con los demás. Deja de consumir (creer) frases mediocres que solamente te programan para eso, para ser un mediocre y complicarte la vida. Los demás son un reflejo tuyo y cuando tú cambias, los demás cambian. Los demás siempre van ser el producto de tus creencias y programas (energía) grabados en tu mente subconsciente. Si no te gusta tu realidad, es el momento de cambiar tus creencias y tu interior.
Abrazos y bendiciones,
Patricia Anaya
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