La piel, para mantenerse en un estado óptimo, debe defenderse de las agresiones externas (frío, viento, sol), pero también debe hacer frente a la dieta inadecuada.
La alimentación es esencial para la salud de nuestra piel. Uno de los secretos de la juventud de la piel está en su capacidad de absorción de los cosméticos con que ayudamos a mantenerla, pero esta capacidad sólo se desarrolla cuando el tejido cutáneo dispone de las proteínas que necesita constantemente. La vitamina C, tiene la capacidad para corregir las alteraciones del colágeno, pues es el principal responsable de la elasticidad de nuestra piel. Esta vitamina la puedes encontrar en los cítricos, como el limón, la naranja o la mandarina; la zanahoria y la lechuga favorecen el buen mantenimiento de nuestra piel y el tono muscular. Los zumos son aconsejables en todas las dietas, los de frutas y verduras son ricos en minerales y vitaminas. Recuerda que la vitamina C, se evapora rápidamente y debes consumirlo una vez lo hayas exprimido. Recuerda que el tomate contiene vitaminas A, B y C y la cebolla posee vitamina A. Las espinacas nos proporcionan hierro, la papa contiene vitaminas B, C y es rica en minerales como el fósforo y el potasio. Los buenos aceites y grasas, como los del salmón y las almendras, ayudan a que la piel no pierda su firmeza y a retrasar el proceso de envejecimiento. Con estas fuentes alimenticias puedes confeccionar una dieta a tu medida para luchar contra la aparición de las arrugas.
Recuerda que un cuerpo deshidratado acelera la vejez. Bebe 10 vasos de agua diarios. La mejor bebida alcohólica es el vino, que además proporciona algunos antioxidantes importantes que protegen el cuerpo. Toma el vino durante la comida o al terminar, porque si lo tomas antes de comer te eleva el nivel de azúcar en la sangre. Nuestra piel debe defenderse también de las agresiones internas de nuestro organismo como el estrés y el nerviosismo.
La hormona cortisol causa arrugas. Los niveles de esta hormona se elevan cuando estás bajo estrés. Contra el estrés lo mejor es dormir bien, no discutir y la meditación. Practicar yoga es una buena opción ya que la tensión causa arrugas y la meditación profunda que acompaña los ejercicios disminuye los niveles de tensión en el cuerpo. Cuando la elasticidad de la piel se comienza a perder y aparecen las temidas arrugas, las mujeres —y los hombres cada vez más— suelen lanzarse en busca de formas de atenuarlas.
Y la verdad es que para quienes se mueven entre los 25 y los 60 años existen muchísimas opciones para combatir estos desagradables invasores, que van desde lo menos violento, como los tratamientos no invasivos en base a cremas que atenúan las arrugas por la vía de la regeneración de tejidos, pasando por el ejercitador de músculos faciales, hasta lo más radical: la cirugía estética. Todo depende hasta donde uno está dispuesto a llegar para combatir las arrugas.
El objetivo siempre es tener un rostro natural que luzca más joven, fresco y descansado.
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