0 MADRES TRABAJADORAS Publicado por Gaudi Rodríguez Juárez el 13 de Octubre de 2010 a las 5:15am Madres trabajadoras©Gaudencio Rodríguez JuárezPsicólogo / gaudirj@hotmail.com“No deja de impresionarme el daño que le hacemos a los hijos cuando nos desesperamos y terminamos regañándolos y hasta golpeándolos por travesuras propias de los niños. Pero, ¿cómo podemos revertir esto si hay veces que después de una larga jornada de trabajo terminas estresada y llegas sin paciencia a casa?”, me lo han preguntado de distintas maneras algunas mujeres y madres que trabajan dentro y fuera de casa.En la actualidad es todo un reto combinar la maternidad con el trabajo productivo. Los horarios son excesivos, la demanda de resultados también, no así los sueldos ni las facilidades para combinarlo con la maternidad, lo cual redunda en estrés.Últimamente las investigaciones en el tema han concluido que los hijos (la palabra se refiere también a las hijas, a las niñas) de padres/madres y familias que viven constantemente estresados tienen más enfermedades y son más infelices que otros niños.El experto Jorge Barudy afirma con toda claridad y sin rodeos que, desgraciadamente, el modelo económico dominante dificulta la disponibilidad de los padres y les obliga a adaptarse a las condiciones de trabajo de los dueños del dinero: “La clase patronal, con el argumento de defender la competitividad, impone a trabajadores y a empleados una flexibilidad horaria que no toma en cuenta las necesidades de los niños”.En este contexto, las madres trabajadoras, han tenido que ser muy creativas.“¿Cómo podemos revertir esto si hay veces que después de una larga jornada de trabajo terminas estresada y llegas sin paciencia a casa?”En asuntos de crianza no puede haber fórmulas pero sí algunas ideas que detonen la reflexión. La clave está en no olvidar que padres y madres tenemos una obligación con los niños que hemos traído al mundo; entre más pequeños más necesidad de cuidado, presencia y constancia paterna/materna:- Para manejar el estrés es conveniente fomentar la propia inteligencia emocional: crear hábitos de manejo de emociones como el autodominio, aprender a resolver los problemas y conflictos de manera no violenta; ejercitar la empatía, la expresión y comprensión de los sentimientos, el control del temperamento, la amabilidad, el respeto, etcétera.- Aprender acerca del desarrollo infantil y métodos no violentos de disciplina; reaprender a jugar.- Desconectarse del trabajo, no llevar pendientes a casa, y disponerse a hacer contacto total con los hijos.- Dejarse llevar por los hijos. No hay que olvidar que ellos se mueven en otra lógica, en otro registro, el registro de la vida, el placer, la fantasía, la creatividad, la risa. Ellos son energía vital que enriquece y contagia a quien se deja. A los adultos se nos ha olvidado jugar y disfrutar, ellos nos lo pueden recordar. Déjate llevar, juega a lo que te propongan, verás que al darles presencia y atención, recibirás vitalidad. La risa, el juego, liberan endorfinas que relajan, que desestresan.- Si tienes pareja, exígele que cumpla su responsabilidad en la crianza, no tienes porqué hacerlo sola, no hay por qué asumir dobles o triples jornadas si éstas se pueden distribuir entre los miembros de la familia. El hijo es responsabilidad de papá y mamá; es necesario equilibrar las cargas. Mujeres y hombres están habilitados para nutrir, educar y criar a los hijos.Finalmente, disfruta a tu hijo todo lo que puedas, porque en un abrir y cerrar de ojos será un hombre o una mujer que habrá dejado el nido. Etiquetas: Maternidad, trabajo Enviadme un correo electrónico cuando las personas hayan dejado sus comentarios – Seguir
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