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LA FALTA DE IMPORTANCIA DEL PASADO

Toda persona, pareja, familia o sociedad que no

revisa su pasado esta condenada a ser infeliz.  

                                                                                                                        Twaanga.

Toda persona, pareja, familia o sociedad que no

planea su futuro con esperanza y fe en si mismo,

está condenada a vivir infeliz

Kaleb

Cuando en el Ahora que está usted viviendo es muy infeliz,

…es que en el Ahora que está usted viviendo es usted muy infeliz

Peter Smith

(A. A)

Cada vez observo la gran importancia publicitaria que le dan al consejo de “vivir el ahora”. Tanta importancia que considero que para algunas personas ya lo convirtieron en dogma. Es decir ya la consideran una ley, una norma a seguir, la cual repiten y aconsejan constantemente, como el dicho ese de antaño: “lo repite como disco rayado”.

Cuando menos recibo un mail por semana donde se aconsejan tres cosas: vivir el ahora, olvidarse del pasado y dejar de preocuparse por el futuro.

¡Está bien, sé que es un buen consejo! ¿Pero como le hago para vivir el ahora? ¿Basta con tener una especie de varita mágica para detener el tiempo en nuestras mentes? ¿Creen que en verdad se puede detener el tiempo?

Nuestra mente y los recuerdos.

Desechamos un recuerdo de nuestra mente y sale otro, desechamos un baúl de recuerdos y sale otro, desechamos una mochila con recuerdos y sale otra. En ese sentido nuestra mente es como un sombrero mágico de donde podemos sacar vivencias y más viven - cias, nuestra mente es una fuente inagotable de experiencias y vivencias. Y eso que no estoy tomando las que yo creo que se nos transmitieron hereditariamente. ¿O creen que a través de la herencia tan solo nos transmiten rasgos físicos de nuestros antepasados genealógicos?

¿Realmente el ahora es mucho mas importante que el pasado o el futuro? Les hago y me hago ésta pregunta. Si es así ¿en que consiste la importancia del ahora? ¿En que consiste la importancia de dejar de pensar en el pasado o en el futuro? ¿No será acaso que la gente ha estado tan metida en su pasado ya sea por fracaso o triunfos, o tan expectantes  por su futuro, ya sea por posibles fracasos o triunfos que no saben vivir el presente?

Estas son mis preguntas, de las cuales tengo  vagas e imprecisas respuestas, algunas de ellas las he compartido en otras ocasiones con ustedes, de muy distintas maneras.

La parte inconsciente de nuestra mente.

Lo primero que tengo que reconocer en mi, es la existencia de la parte inconsciente de mi mente, lo cual yo sé que es muy diferente en cuanto a funcionalidad a mi parte consciente. Ya les mandé mi primer ensayo sobre lo inconsciente y aunque no lo desarrollé, allí mencioné que una de las leyes del inconsciente es que ES ATEMPORAL.  Eso quiere decir que en el inconsciente no existe el tiempo. Y por no existir el tiempo pues coexisten los tres tiempos.

Se los voy a decir de una manera más impactante y menos científica, pero si profesional y terapéutica:

¡Al inconsciente le vale madres el ahora, el futuro y el pasado!

¡El inconsciente es eterno, y por eso mientras no descifres lo que nos quiere decir o aprendamos la lección que no hemos pasado, y que estamos reprobando, nos va a estar jodiendo una y otra vez hasta que aprendamos!

¿Ahora sí, ya se entendió lo que quiere decir atemporal?

¿Ya se fijaron cuantas leyes existen en el inconsciente?

¿Qué no se acuerdan? Pues rápido. Les invito a leer nuevamente mi breve ensayo sobre lo inconsciente, ¡Que yo escribo para gente que realmente quiere conocerse y superarse, no para que me comenten en una charla de café!

Nota: ahora si sigo en mi lenguaje medio científico.

Yo como psicólogo estoy acostumbrado a pensar así, a pensar en la parte inconsciente de mi mismo y de mis pacientes. Cuando menos eso explica que a veces, yo consciente- mente me puedo poner a pensar en mi pasado, controlando mi capacidad de recordar, pero aún así, a veces se me viene un alud de recuerdos que no quiero recordar en ese momento, ¿Qué me sucede en ese momento? mi mente inconsciente está recordando automáticamente  y me los ofrece.

¡Y yo sé que esa forma de recordar mi pasado es ajena a mi voluntad! Para nada me asombra o asusta y muy al contrario me es muy interesante y me pongo a observar y estudiar que es lo que me quiere decir mi inconsciente.

La gente que pregona el no pensar en el pasado ¿estará tomando en cuenta éste mecanis- mo psicológico? Es decir, que a veces recordamos en contra de nuestra voluntad y que es un suceso natural mental.

Cualquier libro de meditación, cualquier libro de relajación mental nos dice que se pre -senta el siguiente fenómeno mental: ¡la aparición de imágenes y recuerdos en forma totalmente automática!

Con éste último comentario quiero aclarar que desde hace miles de años se sabe de la existencia de éste proceso normal del funcionamiento mental. Lo que nunca nos dicen es que es un proceso normal e involuntario, repito IN VO LUN TA RI O, ¡no tene -mos control sobre esos recuerdos!, que pueden ser pensamientos, imágenes, vivencias, sueños, melodías etc. Y lo más asombroso es que a veces ni recordamos o ni recono- cemos esos recuerdos. Es decir es un proceso totalmente normal, en el cual  nos quedamos tan solo  como testigos del funcionamiento de nuestro inconsciente.

¿Que por qué digo asombroso?, ¡porque está en nosotros mismos……! está en nuestras mentes, y aunque nos damos cuenta de ello, no podemos hacer nada. Te invito a que en verdad cierres los ojos en este momento por dos minutos con reloj en mano. Cierra los ojos y de inmediato observarás casi todo lo que he mencionado hasta ahorita.

NUESTRA VIDA ES UN CONSTANTE APRENDIZAJE.

Todos nosotros crecemos y nos desarrollamos físicamente y psicológicamente, pero desde que nacemos estamos aprendiendo por ensayo y error, e imitación de tal manera que se nos va acumulando ese aprendizaje y se convierte en experiencia.

Experiencia que nos permite crecer y aprender a reconocer cuando estamos actuando equivocadamente y cuando no estamos actuando equivocadamente. Toda la vida es aprendizaje, y tenemos la capacidad de aprender de nosotros mismos. ¡Siempre estamos aprendiendo! O siempre podremos aprender de nosotros mismos.

Tendremos que aprender hasta morir, justo cuando nos estemos muriendo.

El aprendizaje implica retornar al pasado una y otra vez hasta aprender.

Imagínese a un niño de 5 años aprendiendo encender la parrilla de una estufa con un cerillo, y tomando conciencia de que todo es aprendizaje,

Se los paso a explicar.

Primero el niño tiene que aprender a agarrar el cerillo, luego tiene que  aprender a agarrar la caja de cerillo de tal manera que al deslizar el cerillo se encienda. No lo logra. Tiene que aprender a presionarlo con más fuerza, no lo  logra, luego sí lo presiona con fuerza pero no lo puede deslizar, y la consecuencia es que  no lo prende. Así que tiene que presionar con una mano, y con la misma tiene que aprender a deslizar el cerillo, no lo logra, tiene que aprender a deslizarlo con cierta velocidad, no lo logra. Con la otra mano tiene que aprender a empujar la caja de cerillos. Hasta que al fin lo logra y aprende a prender el cerillo, lo avienta. Se quemó los dedos.

Ahora viene el siguiente aprendizaje, como mantener el cerillo encendido en sus deditos sin quemarse los dedos                                                          

Además el que lo haya logrado una sola vez no significa que lo vaya a seguir logrando en el próximo intento, tiene que revisar el pasado inmediatamente, para saber como lo hizo y practicar, hasta que lo prende, pero se vuelve a quemar los dedos.

Arroja el cerillo encendido. Así lo practica una y otra vez hasta que por fin logra mante- ner entre sus dedos los cerillos encendidos,

Paso siguiente: aprender a prender la estufa. No es fácil.

Porque tiene que aprender a girar la perilla de la estufa, justo en el momento en que tiene encendido el cerillo. ¿Creen que lo va a lograr en el primer intento? Tal vez no.

Pasan los años, dos años, tiene 7 años. Lo vuelve a intentar, recuerda el pasado, lo que hizo y como lo hizo, ya tiene más habilidad manual. A los pocos intentos ya prende el cerillo y lo mantiene entre sus deditos. Ahora el siguiente paso es girar la perilla del encendido de la estufa. Entra en conflicto, giró primero la perilla de la estufa, pero ¿y si no logra encender el cerillo?… se va a salir el gas…. Primero enciende el cerillo… pero ¿y si no logra  girar la perilla a tiempo…? se quema la mano y ya sabe lo que se siente quemarse la mano, ya aprendió eso. Necesita aprender los siguientes pasos.

Así que sin que se de cuenta empieza a aumentar su coordinación de movimientos, tiene que aprender a coordinar los movimientos de sus manos, de su vista y del oído que escucha cuando el gas ya se esta saliendo.

Durante ese tiempo sin que se de cuenta esta moviéndose mentalmente del pasado al presente, del presente al pasado. Y del presente al futuro, y el sentimiento de fondo es la confianza en si mismo. En ese momento su presente es muy angustiante.

Ya anteriormente Kaleb y Twaanga nos habían dicho que la vida es ritmo, ¿comprenden ahora? ¿Comprenden ahora que en parte nos han querido enseñar de ese sutil  movimien to mental que va del pasado al presente y al futuro, o del pasado al futuro y luego al pre- sente o del futuro al presente y luego al pasado? Y algunas combinaciones más. Cuando yo estoy en sesiones psicoterapéuticas con mis pacientes, tengo que estar al tanto de ese movimiento mental que se presenta tanto en mis pacientes como en mi mismo. Sigamos.

Ese niño tiene que aprender, y  para  esto tiene que revisar su pasado, tiene que aprender a revisar su aprendizaje del pasado, tiene que revisar hasta donde se quedó en ese apren- dizaje, si no lo hace se va a quemar una y otra vez, una y otra vez porque no ha aprendi- do a coordinar lo que ve, lo que escucha, lo que siente, con sus movimientos y con sus

Intenciones futuristas.

¿Van entendiendo?...

Renunciar a aprender de nuestro pasado es estar en contra de una ley psicológica.

“Revisar el pasado nos sirve para generar aprendizaje”. Si pensamos en el pasado sin generar aprendizaje, entonces no nos es útil pensar en el pasado.

Lanzo la siguiente hipótesis que en verdad jamás he leído: el ser humano por ser un ser inteligente y con gran capacidad de aprendizaje y creatividad, tiene en su capacidad de recordar un gran poder de aprendizaje. La parte inconsciente de la mente también tiene su propia capacidad de recordar que estimula al ser humano a aprender de sus propias vivencias para aumentar sus experiencias. Eso explica que nos devuelva recuerdos en forma involuntaria para ayudarnos tanto en nuestro desarrollo mental como en nuestra salud mental.

En nuestra mente hay algo que parece una ley psicológica: nuestro inconsciente nos devuelve una y otra vez el pasado para que  aprendamos, para que nos deje una experiencia y dejemos de repetir el pasado que nos trae consecuencias nefastas en nuestra actualidad, y nos hace que veamos el futuro con pesimismo.

Recordar por recordar no tiene ninguna utilidad, al contrario es cuando puede ser hasta perjudicial a nuestra salud mental, pero si recordamos para aprender, entonces es muy distinto.

La universidad de la vida.

Yo creo que el ser humano posee en forma innata la capacidad de aprender, y tiene la habilidad de convertir en lecciones las vivencias cotidianas;  y mientras no hayamos aprendido, vamos a seguir repitiendo esa vivencia hasta que la podamos superar y pasar a otro nivel de experiencia y de conocimiento. Cuando digo innato me refiero a que es algo natural,  y propio de la especie  humana.

Yo creo que una de tantas finalidades del recordar en forma automática es el de apren -der de lo vivido, y en la medida que estamos aprendiendo estamos creando experiencia, porque la experiencia se da con el aprendizaje.

Si no aprendemos y creamos experiencia estamos condenados a repetir la lección.

Twaanga

Toda vivencia nos lleva a una lección de vida y a una enseñanza y a una aplicación. Y eso nos lleva a un conocimiento y entonces  finalmente adquirimos  habilidad

Cuando hemos aprendido del pasado y adquirimos experiencia, entonces nuestro futuro ya no es tan pesimista o aterrador, pero como el futuro también está en nosotros mismos entonces quiere decir que empezamos a desarrollar la fe y la esperanza en nosotros mis- mos y por lo tanto esperamos al futuro con optimismo, y eso nos permite concentrar -nos en el ahora.

Entonces una conclusión es que “la forma de vivir adecuadamente en el ahora y practicar a vivir en el ahora” es cuando estamos aprendiendo de nuestro pasado, y esperamos con confianza el futuro; solo que todo éste proceso se da dinámicamente, en donde el tiempo fluye en nosotros, en nuestra mente, y no se queda estancado en ningún periodo de tiempo. En el momento en que nos quedamos estancados por mucho tiempo ya sea en el presente, en el pasado o en el futuro, nuestra vivencia mental se está osifi -cando, endureciendo y está permaneciendo fija en un solo tiempo, persistiendo en una sola idea obsesivamente. Nuestra mente se está quedando en un solo tiempo y empieza a tener la imposibilidad de pasar de un tiempo al otro. Alguna parte de nuestra mente se encuentra bloqueada.  La permanencia mental en un solo tiempo va a influir en nuestro entorno tanto a nivel físico (corporal-ambiental)  como a nivel social. 

Cuando digo que: “La permanencia mental en un solo tiempo va a influir en nuestro entorno tanto a nivel físico (corporal-ambiental)  como a nivel social” me refiero al hecho observable de que entonces si nos quedamos mucho tiempo por ejemplo con un conflicto no resuelto como por ejemplo una inconformidad no expresada, que incluye odio, rencor por decir algo, entonces ese conflicto mental presente se hace presente en nuestro cuerpo y puede dar lugar a enfermedades psicosomáticas, es decir ya está influyendo en nuestro entorno corporal. Si quiero ejemplificar con nuestro entorno ambiental, pues entonces en el lugar donde estemos, muestra nuestros signos de odio y rencor y es posible que haya destrozos o el ambiente esté descuidado; y si lo quiero ejemplificar a nivel social entonces esa persona empezará a tener conflictos sociales con otras personas pero por conflictos psicológicos no resueltos y generalmente tienen en la actualidad conflictos con otras personas que nada tienen que ver con el conflicto original.

Nosotros entonces tenemos la capacidad de influir en los procesos de tiempo de nuestras mentes. Nosotros finalmente somos los responsables “del correr del tiempo” en nuestras mentes.

Y como todo es aprendizaje entonces es a nosotros a quien nos corresponde quedarnos a  practicar, observar y aprender de nuestro pasado. A nosotros nos corresponde practicar a quedarnos en nuestro presente y aprender de nuestro presente. A nosotros nos corres -ponde planear nuestro futuro y aprender de nuestra capacidad de planear nuestro futuro. Todo esto que acabo de escribir en este párrafo es totalmente diferente al simple consejo de quedarse tan solo en un solo tiempo mental, a quedarse en el ahora.

Recuerden lo siguiente: físicamente y socialmente siempre estamos en el presente querámoslo o no.

Para terminar este breve ensayo sobre el tiempo mental,  les diré entonces que:

“Tan perjudicial es mantenerse fijamente en El Pasado o en El Futuro, como en El Ahora”

Dr. Pedro Cortines Hernández

Psicoterapeuta

Atentamente

Dr. Pedro Cortines Hernández

Bibliografía sugerida:

Su Propio Libro De Su Vida. (Ese yo no lo tengo)

Como vivir el día de hoy

El vacío

Un instante

Solo por hoy, si no lo encuentras…

El tiempo

Lo inconsciente.

                                Miércoles 22 de octubre de 2008

              ¿Me quieres escribir? Mi correo es kaleb.4407@hotmail.com