ES HORA DE COLGAR LOS GUANTES

Hay mujeres que parecen boxeadoras, se pasan toda la vida repartiendo puños a granel, pero no a otras personas y mucho menos a un saco de arena,  sino que se golpean a si mismas. Y qué muchos trompazos se dan; “¡Golpe bajo a la confianza, gancho de izquierda al amor propio y puñetazo directo a la autoestima!”

 

Cada vez que te criticas despectivamente estás haciendo lo mismo que un boxeador cuando ataca a su contrincante en diferentes puntos del cuerpo. Poco a poco, lo debilita y finalmente lo derrota de tal forma que cuando cae al suelo no puede levantarse. Eso mismo es lo que haces contigo cuando te menosprecias; terminas noqueada con la autoestima por el piso, ¡y qué difícil es levantarla!

Algunas de las trompadas más populares con las que tal vez te atacas son: “Qué gorda estoy, parezco una ballena”, “Odio mi celulitis, no me cabe un hoyo más”, “Mis senos parecen dos huevitos fritos”, o “Estoy más arrugada que una pasa”.

Para de actuar como si tu y tu cuerpo estuvieran en un cuadrilátero. Date valor y deja de compararte con otras. La raíz de todas las inconformidades que tienen las mujeres se originan en la comparación. Cualquier queja o insatisfacción que tengas, viene de compararte; nadie protesta por  algo sin antes consciente o inconscientemente haberse comparado con alguien que considera mejor.

El problema es que siempre va a existir otra que tenga más que tú, sea más belleza, más dinero, más inteligencia, más fama, más poder o más suerte en el amor. Pero al mismo tiempo, siempre habrá otra con menos que tú.

Si te paras al lado de una que tiene cuerpo de guitarra, cabellera sedosa y piel de porcelana como la hermosa Jennifer López, te sentirás opacada. Pero si te comparas con una de cuerpo ovalado, chaparra y cara malhumorada, como Paquita la del Barrio, sin duda, te sentirás hermosa.

Deja de compararte, acepta que todas somos diferentes y cada cual tiene sus defectos y encantos. No existe el cuerpo, ni la cara perfecta. No te sientas inferior, admira tus atributos. Es hora de retirarte del cuadrilátero y acabar la pelea. No importa lo que haya sucedido anteriormente en tu vida,  hoy puedes tomar la decisión de quitarte los guantes y ser feliz.

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Comentarios

  • Me gustó. Es dificilísima la aceptación, cuando hemos adquirido como hábito la crítica. Sin embargo, yo estoy segura que por muy difícil, el trabajo constante con nuestra autoaceptación nos llevará a colgar los guantes.

  • Tus comentarios reflejan menosprecio, la referencia a Paquita La del Barrio en discriminatoria, cuida eso por favor.

  • me gusta mucho tu manera de pensar, te felicito, estoy totalmente de acuerdo contigo, saludos

  • Hola!!!

     

    María me encantan tus publicaciones y sabes una cosa aveces el maltrato también viene de idealizar las relaciones de amor, pareja, trabajo, compañerismo, etc... pensar que si una le echa muchas ganas a una relación todo será maravilloso.

     

    Hay que recordar que son nuestras voluntades las que nos atacan en primer término. Aveces nuestras búsquedas traen despropósitos. Pareciera que el amor es cosa de descerebrados y a continuación se verá porque…

     

    Las emociones pueden ser tan primitivas y  sumadas a la violencia, sufrimiento y acelere que caracteriza a nuestra sociedad neurótica se convierten en tóxicas. No hemos comprendido que el odio que se ve durante el KUN FU MARITAL nunca cura... Si el matrimonio es trabajo porque los conyugues no se dan vacaciones forzosas uno del otro una vez al año por lo menos, y de una semana.

     

    Es cultural que la mujer atosigue a un hombre porque se nos ha enseñado que aún la  mujer más pasiva  debe aspirar a provocar fascinación y aojamiento en su hombre para que nadie se le acerque –sobre-todo-. Rogarle a un hombre, chantajearlo, embarazarse a propósito aun entrados los años, y;  acorralarle con atenciones y sobre todo admiración es una arma de la adoración muy extendida entre nuestros usos y costumbres. El hombre idealizado en príncipe puede darse el lujo de tener modales de batracio. En este punto se normaliza el caos y en una especie de nacionalismo y patriotismo exhaltado con fervor religioso se enajena la imagen y el cuerpo del otro y se convierte en un lienzo sagrado, ungido el Mesías luce como Príncipe Erótico. ¿El Monopolio de mi sapo como un falso positivo?.

     

    ¿Le pedimos perlas a la virgen?

     

    Si cambian los hombres a gusto de su mujer, a  mi parecer  es para convertirse en niños –regresión a estadios infantiles-...

     

    continua....

  •  La mujer aspira y suspira que su marido dependa al 100% de sus cuidados maternales -así nunca le dejara- El hombre convertido en niño es más fácil de manipular –lactante del pecho hedónico-. Yo creo que sí existe también el sometimiento masculino a causa del machismo feminista, de aquí nace el hombre feminizado...¡¡¡Claro, él la  descalificara en sus pocos momentos de lucidez  como BRUJA!!! Se imagina una medusa maldita llena de falos en la cabeza que con su simple mirada lo hará de piedra. Pero,  desde una  óptica infantil de caricaturas, cuentos, aparecidos, mitos, leyendas  y épicas de mini-ficción que podrían llamarse “EL NIÑO QUE PONE EL COCO Y LUEGO LE TIENE MIEDO”. ¿Las mujeres/esposas presuntas culpables de infanticidio y comics?

     

    Yo siempre me he preguntado; ¿Quién de ambos tiene más hambre de protagonismo teatral?, o será que ¿Todos tenemos un dueño y un perro?.

     

    Nota.- Sólo cabe recordar que hay perros que deguellan a sus amos.

     

    Yo definiría las peleas como actos de independizarse de la sumisión pero que al final nos llevan a un circulo vicioso “la alta tensión”....“¿me he de comer esa tuna aunque me espine la mano –y después me tape-?“

     

    El Amor  y el Poder son búsquedas diferentes, ¿No lo sabes, acaso?  “El gigantesco e irracional proceso de ensayo y error”

     

    Definitivamente ni el amor ni el matrimonio es el problema, es el monopolio como padre de todos los vampiros chupasesos del amor, el masoquismo pero sobre todo el aburrimiento que puede provocar el hecho de verse vivir recíprocamente el uno para el otro lo que provoca estrés extremo.

     

    Freud dice  que las personas no somos tan racionales como suponemos y que  estamos dominados  en gran medida por fuerzas irracionales...yo sumaria que es a causa del cautiverio de pareja que nosotros mismos promovemos el que trae miopía, sumado al hecho de que el que se enamora es el inconsciente.. Formar mujeres y hombres que piden permiso –incluso- trae a la larga una carga explosiva de dimes y diretes y hasta golpes. Para aspirar y suspirar a ser el monarca de la vida amorosa en casa también hay que salir de ella. ¿Qué tal un pokar con los amigos o cualquier actividad independiente de nuestro gorila emocional; variar de amistades, gustos, deportes, horarios, carrera y  hasta religión?

     

    Nuestro  trabajo es liberarnos de todos lo negativos, es decir; “no hemos nacido sólo para nuestras familias”.

     

    ¿El hombre feminizado y no el  príncipe es el  resultado de su bruja?  ¿O, simple visión doble?

     

    GRACIAS por compartirlo y saludos cariñosos

     

    Fabiola Guerra Ugalde

  • Estoy de acuedo en CASI todo lo que dices, muy bien los consejos y las reflexiones; lo único que no me gusto es que te refirieras a PAQUITA LA DEL BARRIO, qué tal si ella sigue esta página, si era admiradora de esta sección?, pues ya le pusiste en toditita...  qué tal si ella se golpea así misma? o qué tal si muchas que están leyendo tu artículo se parecen a ella o estan peor que ella??, entonces dónde queda tu ayuda??

    Espero tomes en cuenta este comentario. Gracias

  • gracias es muy edificante lo que compartes saludos.

  • Aceptarse y trabajar en las debilidades, siempre podremos mejorar de poquito en poquito. Si te sobran kilos, bájalos de uno en uno, si debes aprender algo divídelo en lecciones, si no sabes bailar inicia por el más sencillo, uno para acá otro para allá, después dos para acá, dos para allá, hasta que mejores y así hasta para hacer el arroz!!!!! Saludos Sol

  • Jajaja tienes toda la razón hay que aceptarse como uno es, aunque cueste un poco de trabajo, jajaja gracias

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