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Cerrar ciclos en la vida se convierte en un proceso difícil y doloroso porque lo primero que tenemos que enfrentar es el cambio.

Cerrar ciclos, terminar relaciones, trabajos, una experiencia anterior, también llamado cerrar círculos.

Todas estas experiencias llevan al cambio y a la modificación de la vida, de los hábitos, de los amores, de los intereses, y también de la presencia de quienes creíamos amar, amamos y ahora ya no están en nuestra vida.

Y se apodera el miedo y el terror al futuro con una avalancha de emociones que por momentos se tornan  perturbadoras y sentimos que no podemos manejar del todo. Y así es.

No podemos manejar todas al mismo tiempo y a veces todas aparecen tan revueltas que no atinamos ni a darles el nombre que les corresponde. Ese es uno de los grandes impedimentos para no enfrentar las situaciones que requieren que cerremos círculos, ciclos o experiencias.

Entrar en contacto con lo nuevo, con lo no conocido nos lleva al temor, al miedo y al arrebato. Deseamos escondernos para que nadie nos vea y que nadie se entere de lo que estamos viviendo.

Tenemos miedo hasta del miedo.

Pero tenemos que seguir adelante, avanzado, los días y las noches se ofrecen como compañeros angustiosos de nuestra situación. Pero ya no podemos permanecer en el mimo lugar, nos guste o no, la vida, la existencia nos lleva siempre al crecimiento.

Pero para crecer tenemos que retornar a nosotros mismos, a lo que vivimos y experimentamos, a lo que está a flor de piel en nuestra vida.

Cambiar, cerrar ciclos, modificar experiencias, dejar el ayer.

Los consejos no ayudan pero tenemos que volver a nosotros mismos si deseamos recuperar nuestro poder personal y empezar a centrar nuestra vida en el “ahora” para construirnos un presente y un futuro mejor.

En mi libro Cómo Enfrentar los Duelos y las pérdidas te hablo de ese proceso que es preciso transitar y caminar. Nos guste o no, tarde que temprano lo inconcluso vuelve a nosotros una y otra vez.

En este material hablo sobre los diferentes aspectos como son:

-      El miedo.

-      La parálisis.

-      La culpa.

-      La ira.

-      El aislamiento.

-      La angustia.

-      La impotencia.

-       

Al mismo tiempo que te propongo una serie de ejercicios para que puedas irte liberando de esta sensación de fragilidad y de baja autoestima.

Solo quienes son capaces de apropiarse de su existencia son los únicos que pueden lograr que la vida se convierta en una mejor alidada para transitar, después de todo la vida no acepta quién nos sustituya en la existencia.

Aquí puedes encontrar algunos materiales que son de alta calidad para tu crecimiento personal.

Confianza

Cerrar ciclos en la vida un camino hacia la libertad emocional.

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Gracias por estar  aquí…