“Es más probable morir en un auto que a manos de delincuentes”
“Los accidentes de transito son la segunda fuente de orfandad en México”
“Los accidentes se construyen paso a paso y que tienen que ver con ignorancia, impericia y dolo”
“Casi la mitad de muertes en accidentes son entre los 20 y 40 años de edad”
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istorias de muerte o milagros de supervivencia. Es un volado que millones de mexicanos se juegan a diario en las calles, avenidas y carreteras del país. Y cada día pierden la vida 47 personas aproximadamente; y un total de 17 mil muertos al año por accidentes viales.
Muchos más que en Argentina, Chile, El Salvador y casi toda América Latina; "estamos peor en términos absolutos y por cada 100 mil habitantes", lamenta Paco de Anda, presidente de Movilidad y Organización, una ONG dedicada a crear conciencia en el tema.
Y los responsables: los sospechosos de siempre, la velocidad, el alcohol, la negligencia, la distracción y la impunidad.
Porque sobre ruedas avanza la primera causa de muerte a partir de los 5 años de edad y hasta los 30 en México. La primera causa nacional de discapacidad motriz: "los cuadripléjicos, parapléjicos y con lesiones de la columna", señala el doctor Arturo Cervantes, director del Centro Nacional de Prevención de Accidentes.
Es la segunda fuente de orfandad en el país, pues mueren los jóvenes en edad productiva y reproductiva, y el principal riesgo de muerte una vez que se abandona el hogar.
En números fríos: es más probable morir dentro de un auto que a manos del hampa. Y no importa que se trate de la Ciudad de México, donde la inseguridad es una de las principales inquietudes ciudadanas.
Los incidentes viales matan al 2 por 1: 3.4 vidas, contra 1.8. "Casi se duplica el número de muertes por accidentes automovilísticos" explica en entrevista Joel Ortega, secretario de Seguridad del DF.
Y la cifra a cuatro años del alcoholímetro aún no logra revertirse. Cada año se suman 180 mil autos nuevos al parque vehicular de la capital y casi 2 millones a nivel nacional. Junto con éstos se dispersan un mismo número de malos hábitos, inconsciencia y excesos: "Es una carrera contra el tiempo, porque mientras vamos queriendo formar público, nos encontramos con nuevos automovilistas con lo que hay que empezar de cero" reconoce Ortega.
"Casi la mitad de las muertes en incidentes de tránsito son entre los 20 y 40 años" explica Fernando Palacio Basto, del Semefo.
Muestra un frasco de 60 centímetros de altura en el que se conserva un feto de 8 meses que se obtuvo del "útero de una mujer arrollada" a los 22 años de edad, mientras argumenta que los accidentes no existen: "son eventos que se construyen paso a paso y que tienen que ver con ignorancia, impericia y dolo".
Y suena lógico, porque en su mayoría no deberían ser. "Nueve de cada diez accidentes son prevenibles", asegura Roberto Cervantes, directivo del Centro Nacional de Prevención de Accidentes (Cenapra).
Y suelta un catálogo de números rojos: por cada muerto hay cerca de 45 personas que terminan en el hospital con lesiones severas y mil por heridas menores. "Estamos hablando de más de 700 mil mexicanos en hospitales y 15 millones con golpes leves al año" resume Cervantes.
Todos ellos con nombre y apellido. Sobrevivientes y fallecidos. Es el caso de la familia Pérez Inclán, donde se conjuntó la tragedia.
Fernanda, una joven de 21 años de edad, salvó la vida en contra de todas las probabilidades. El impacto del auto que la embistió junto con otros cuatro que salían del rodeo Santa Fe a eso de las 4 de la madrugada, fue precisamente sobre ella.
"No sé porque volteé hacia mi derecha, pero vi la luz del coche que se aproximaba a toda velocidad. Tu cuerpo pone la adrenalina y logré enconcharme", relata mientras se queja de un leve dolor del hombro izquierdo que aún falta por operar.
"Si no hubiera visto los faros del coche me hubiera desnucado como mi hermana o como José Antonio", que iban con ella en el asiento trasero o como el mismo Santiago, que conducía.
Luego de 26 días en coma y 11 operaciones, despertó con la noticia de la muerte de su hermana de 22 años, "su mejor amiga".
Pero los relatos asombrosos, conmovedores e inverosímiles se repiten por todos lados.
La historia de Rodrigo Domínguez de Pedro, otro improbable sobreviviente viajó hasta España, de donde es su familia.
Se convirtió en uno de los milagros adjudicados a la Madre Maravillas, quien recientemente fue canonizada. "Se me seccionó la uretra, se me enterró el freno de mano, los pulmones se me llenaron de sangre. Se supone que tenían que haber reventado todos los órganos internos y que al menos pasaría 6 meses en coma."
Pero Rodrigo volvió a la vida en cosa de días y al mes caminó como si nada, en contra de todo pronóstico.
Fernanda y Rodrigo se accidentaron como predice la estadística. De madrugada, con alcohol de por medio y durante el fin de semana.
"De 11 a 12 de la noche y hasta las 5 o 6 de la mañana es el horario más peligroso para conducir en fin de semana", subraya Armando Quintero, secretario de Transporte y Vialidad del DF.
Pero el alcohol no es el principal factor de riesgo para morir sobre ruedas. El enemigo número uno es la velocidad.
"A mayor velocidad mayor probabilidad de muerte; si tienes un accidente a partir de los 60 kilómetros por hora, la probabilidad de muerte se aproxima al ciento por ciento", detalla el doctor Roberto Cervantes del Cenapra.
Y precisa: chocar a 50 kilómetros por hora es equivalente a aventar a un niño de un edificio de cuatro pisos a la calle contra el cemento.
Por eso, los accidentes viales son la primer causa de muerte para los niños entre 5 y 10 años de edad.
Sin el cinturón de seguridad se convierten en proyectiles en potencia. Y así lo muestran decenas de publicidades españolas, francesas e inglesas, en extremo crudas, que abundan en YouTube. Ninguna es mexicana, porque en México, el gasto en prevención es todavía menor.
Y en consecuencia, la inconsciencia es reina. Basta un recorrido de viernes por la noche en la ciudad en busca de alcoholímetros y cazando ambulancias.
A las 23:45, justo a 2 kilómetros de un retén del programa conduce sin alcohol, un joven de 25 años, en estado de ebriedad y conduciendo a exceso de velocidad, embiste a otro que pretendía ingresar sobre Bosques de Reforma. No hubo muertes que lamentar.
A las 0:30 horas, sobre el Eje 2, un adolescente de 19 años se estrella contra la grúa de otro retén de seguridad del DF. Lesiona a un oficial gravemente de la columna. Y el joven en cuestión se enterró decenas de vidrios en el rostro, pues no llevaba el cinturón de seguridad.
A un lado, en el asiento del copiloto, se observan dos envases de cerveza vacías.
Y la historia se repite cada semana, cada minuto, cada segundo. A lo largo y ancho de la República. Con y sin alcoholímetro, con y sin radares, con y sin licencias por puntos, con y sin conductor asignado.
Estamos en un crecimiento de cerca del 10 al año en los accidentes mortales. Un aumento constante y más acelerado en los accidentes, incluso que el parque vehicular.
E
n la actualidad, el fenómeno de los accidentes de tráfico es un tema de significativa importancia en el ámbito mundial debido, tanto a su prevalencia, como a las consecuencias que tiene en la población en términos económicos, de salud y sociales. En México, las lesiones provocadas por accidentes de tráfico han mantenido durante la última década el tercer sitio dentro de las diez principales causas de muerte; el 77% de ellas ocurren en zonas urbanas y son la población joven entre 15 y 29 años, el género masculino y los peatones los más afectados. En el 2001, se registraron en nuestro país 27.4 muertes de jóvenes en accidentes de tráfico por cada cien mil habitantes, representando el 6% del total de defunciones registradas ese año. A pesar de que existen variaciones por región, constituyen la primera causa de muerte en la población en edad productiva. Buscando obtener un resultado favorable de la disminución de muertes por esta causa se determinan los siguientes objetivos.
Objetivo: A partir del grado de conocimiento que tienen los jóvenes universitarios sobre los factores de riesgo asociados a los accidentes de tráfico (AT) se debe de diseñar conjuntamente una campaña informativa y evaluar su impacto.
Metodología: Sé propone la realización de un estudio con métodos combinados: cualitativo y cuantitativo. El estudio constará de tres etapas principales: 1) identificación del grado de conocimiento que los jóvenes tienen sobre los accidentes de tráfico, 2) diseño y desarrollo de una campaña informativa y 3) evaluación del impacto de la intervención. Etapa 1: Para la primera etapa se propone la realización de un estudio de corte transversal aplicado a jóvenes universitarios (17-25 años) cursando licenciaturas en tres universidades de la república mexicana (pública y privadas) a partir de una muestra probabilística, aleatoria y estratificada por edad, sexo, área de estudio y plantel universitario. El propósito será definir perfiles de usuarios de la vía pública así como generar escalas de conocimiento sobre factores de riesgo asociados a los AT. Se utilizará un cuestionario de auto aplicación entre jóvenes universitarios de la Ciudad de Cuernavaca. Etapa 2: Primera fase: a partir de la encuesta, se desarrollarán sesiones de grupos nominales con jóvenes universitarios seleccionados según: sexo, edad, tipo de usuario de la vía pública. El propósito será: 1) identificar y seleccionar vía consenso los elementos a incluir en la campaña informativa. Segunda fase: 2) acordar vía consenso las bases de una convocatoria para un concurso abierto a estudiantes universitarios de áreas de conocimiento relacionadas de acuerdo a los elementos identificados previamente 3) selección de la propuesta ganadora. Tercera fase: 4) implementación de la campaña informativa. Se desarrollarán de dos a tres grupos nominales en cada institución universitaria, incluyendo conductores frecuentes, conductores ocasionales y peatones. Los grupos serán mixtos, de seis a ocho participantes, incluyendo a jóvenes de diferentes edades. Etapa 3: Evaluación del impacto de la intervención. La tercera etapa consistiría en la medición del impacto mediante el mismo cuestionario de auto aplicación utilizado antes de desarrollo de la campaña entre jóvenes universitarios tres meses después de la puesta en práctica de la campaña para identificar grado de conocimiento y posibles cambios. Para el procesamiento de los datos se utilizará el paquete SPSS en la captura y el análisis de los cuestionarios. Las sesiones de grupo nominal serán video grabadas previo consentimiento y posteriormente transcritas; la sistematización de esta información se hará con la ayuda del software ATLAS TI. Resultaos esperados: Realización de una campaña informativa diseñada por jóvenes y para jóvenes, considerando el grado de conocimiento respecto a los elementos que deben ser incluidos en la prevención de los AT.
PREVENCIÓN DE ACCIDENTES
Son hechos que se presentan en forma repentina e impredecible que ocasionan daños a las personas. Son generados por descuido personal o error humano y ocurren en la escuela, hogar, vía pública, trabajo, en lugares recreativos y otros.
Muchos accidentes se pueden prevenir o evitar; para ello toma las siguientes precauciones: físico, mental y emocional, que influyen de manera importante en la relación de los adolescentes con su familia, sus amigos, su pareja, sus compañeros de escuela o de trabajo.
Es frecuente que este proceso de cambio genere sensación de inseguridad, rebeldía e inconformidad, que se manifiesta en un choque constante de los adolescentes con sus padres, profesores, jefes y en general, con cualquier persona que represente una figura de autoridad.
Para intentar prevenir los accidentes hay que analizar primero los elementos que intervienen en ellos. Por un lado están las personas, conductores de los vehículos, que tienen que estar en perfectas condiciones tanto físicas como psíquicas para manejar un vehículo con seguridad. Nunca se debe coger el volante de un vehículo si se tienen evidentes síntomas de cansancio, embriaguez, mareos u otras enfermedades que puedan reducir nuestro nivel de reflejos en alguno o mas sentidos.
Por otro lado, están las calzadas, que deberían estar en condiciones óptimas para su utilización y que por desgracia no siempre es así. Estas condiciones se refieren tanto en estado como en señalización, ya que son con las cuales nos referenciamos cuando desconocemos la vía por la cual circulamos. Esta falta de condiciones óptimas, deben ser suplidas con el sentido común de los conductores a la hora de circular.
Como ultimo elemento está el propio vehículo, que debe reunir todos los requisitos existentes en esta materia para poder circular por las vías. Se deben revisar periódicamente los elementos tanto externos como internos, y pasar las revisiones obligatorias que nos autorizan a poder utilizar el vehículo por las vías. Los elementos a revisar son el estado de los neumáticos, de los frenos, del sistema de amortiguación y dirección, de alumbrado, de señalización y dentro del apartado mecánico, pasar las revisiones correspondientes de mantenimiento en talleres autorizados.
Si intentamos que todos estos elementos estén en correctas condiciones se minimizarán los riesgos de tener accidentes de tráfico.
Como Realizar Una Buena Conducción.
Para realizar una correcta conducción de cualquier tipo de vehículo se deben seguir los siguientes pasos dentro de las normas que actualmente están establecidas.
En primer lugar se tendrá que estar preparado física y psicológicamente para en segundo lugar recibir la formación adecuada dentro de centros especializados o con el material formativo autorizado (libros y manuales) de cara a incorporarse al grupo de conductores que existen actualmente.
Además, para demostrar que estamos en condiciones óptimas debemos someternos periódicamente a unos reconocimientos médicos en centros autorizados.
La atención y la fatiga.
- Cuando se conduce un vehículo debemos estar atentos a todas las circunstancias que nos rodean y así estar previstos ante cualquier situación imprevista que se nos presente. Si estamos cansados, física o psíquicamente, los reflejos se verán disminuidos y el tiempo de
reacción también en función del mismo. El exceso de calor, una posición inadecuada al conducir, las comidas pesadas y abundantes, los medicamentos y las drogas o alcohol, etc... son aptitudes que influyen negativamente en la conducción aumentando el riesgo de accidentes.
Siempre es conveniente descansar cada 3 ó 4 horas de conducción o menos si se cree necesario.
Revela estudio del Instituto de Salud Pública de la UV, que el 40 por ciento de los accidentes de tránsito son Provocados por el alcohol
Una Investigación en la ciudad capital Xalapa halla que un 26 por ciento más son causados por exceso de velocidad; un 34 por ciento de las personas involucradas no tenían licencia y 25 por ciento no usaba cinturón de seguridad
Del total de los accidentes de tránsito ocurridos durante 2006 y registrados por la Dirección General de Tránsito y Transporte (DGTyT) de la ciudad de Xalapa, 40 por ciento tuvo como causa el conducir en estado de ebriedad, reveló un estudio realizado por el Instituto de Salud Pública de la Universidad Veracruzana (UV).
Hensy Cortés Jiménez, alumna de la Maestría en Salud Pública, del Instituto de la especialidad de la UV La investigación titulada “Factores relacionados con accidentes de tránsito en la ciudad de Xalapa”, que fue realizada por la estudiante de la Maestría en Salud Pública de la UV, Hensy Cortés Jiménez, también encontró que un 26 por ciento de los accidentes son provocados por exceso de velocidad.
“Según las cifras y el cruce de información que hicimos, se encontró que una persona que está alcoholizada y conduce a exceso de velocidad tiene 3.38 veces más posibilidades de tener un accidente, y en personas de entre 15 y 44 años, esta cifra se eleva casi a 15”, aseguró Cortés Jiménez.
La investigadora detalló que el estudio abarca todos los accidentes registrados por la DGTyT de Xalapa durante el año 2006 –que fueron un total de 380–, de entre los cuales 65 por ciento de los involucrados fueron hombres, 35 por ciento fueron mujeres, y el grupo de edad que más accidentes protagonizó, fue el de entre 20 y 29 años.
“De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), México ocupa la quinta posición en América, en cuanto a proporción de accidentes como causa de defunción y estos hechos causan 2.8 por ciento de todas las discapacidades que se registran en el país. Además, según la Encuesta Nacional de Salud 2006, la prevalencia aumentó de 6 –en la encuesta anterior de 2000– a 8.8. Y en cuanto a las mujeres la prevalencia pasó de 3.3 a 6.6, y en hombres del 8.1 a 10.1”, explicó la investigadora.
El estudio incluye datos sobre cuál es la hora del día en que más se registraron accidentes, y con 37 por ciento, la tarde fue la hora de más incidencia, seguida de la madrugada con 28 por ciento; en lo que respecta a los días, los sábados fue cuando más ocurrieron, con 24 por ciento, seguido de viernes y domingos.
“De los 380 accidentes, en 11 por ciento hubo personas que fallecieron, en 29 por ciento de los casos hubo personas lesionadas, y de ese universo, 41 por ciento requirió hospitalización. Además, 25 por ciento de los involucrados en los accidentes no usaba el cinturón de seguridad y 34 por ciento no portaban licencia de conducir”, aseguró.
El estudio también propone el desarrollo de un sistema de vigilancia epidemiológico que permita recolectar de manera sistemática, continua, oportuna y confiable, la información necesaria para tener un registro de los accidentes de tránsito, ya que actualmente en Veracruz no hay un sistema de este tipo, por lo que se carece de fuentes de información, además de poner en marcha un plan de comunicación social que contribuya a modificar la cultura vial de las personas.
10 Consejos Importantes para la prevención de accidentes
(1) Desarrolla una actitud responsable al conducir
La causa de muchos de los accidentes automovilísticos de adolescentes no es falta de conocimiento o ineptitud. A menudo es un problema de actitud y madurez. Comprométete a desarrollar y practicar una actitud responsable cuando conduces.
(2) Procura conducir bajo supervisión la mayor cantidad de tiempo posible
Establece una rutina fija con tus padres para que puedan supervisarte mientras conduces. Procura conducir en distintas condiciones para aumentar tu experiencia y adquirir confianza. Pide a tus padres la oportunidad de conducir en mal tiempo, con mucho tráfico, en la ciudad, en zonas rurales y de noche.
Comprométete a conducir bajo supervisión por lo menos seis meses para poder aclimatarte a la calle antes de tomar el examen para obtener la licencia de conducir.
(3) Abróchate el cinturón de seguridad en todo momento
Uso el cinturón de seguridad todo el tiempo, sin excepción. Los cinturones de seguridad salvan vidas.
(4) Entiende las consecuencias de conducir bajo la influencia de las drogas o el alcohol
El tomar alcohol o usar drogas al conducir es totalmente inaceptable. El consumo de las drogas y alcohol por adolescentes no sólo es ilegal-- también puede afectar tus sentidos. Aunque sólo tomes una bebida o fumes un cigarrillo de marihuana, esto tiene un efecto químico en tu cerebro que puede afectar tu juicio y tiempo de reacción.
Date cuenta que el manejar bajo la influencia del alcohol, marihuana y otras drogas es claramente peligroso. Te puede costar tu licencia... o tu vida.
Para información sobre el uso de las drogas en español visita www.LaAntiDroga.com o www.Freevibe.com para información en inglés.
(5) Trata de llevar pocos pasajeros en tu auto
Si recién empiezas a conducir, limita la cantidad de pasajeros que llevas en tu auto. El riesgo de un accidente fatal aumenta con cada pasajero adicional.
(6) Evita conducir de noche
El riesgo de un accidente fatal es tres veces mayor de noche que de día. Cuando recién comiences a conducir, limítate a hacerlo durante el día.
(7) Conduce despacio y con cautela
Evita conducir en lugares con mucho tráfico y de alta velocidad hasta que tengas suficiente experiencia manejando bajo la supervisión de alguien. Poco a poco, comienza a conducir en situaciones más difíciles como por ejemplo, en carreteras, en rampas donde confluye el tránsito y en grandes zonas urbanas.
No olvides que el exceso de velocidad es la razón más común por la que los nuevos conductores pierden el control de sus vehículos.
(8) Aprende a conducir en mal tiempo
Ten por seguro que no te sentirás cómodo al conducir en mal tiempo sin supervisión. Obtén la mayor cantidad de práctica supervisado en tormentas, nieve, viento, aguanieve y hielo. No conduzcas solo cuando haya mal tiempo hasta que te sientas seguro.
(9) Utiliza el teléfono celular sólo en casos de emergencia
No hables por teléfono celular mientras conduzcas. Utiliza el teléfono celular sólo en situaciones de emergencia. Si necesitas usar el teléfono, detente en un lugar seguro al costado de la carretera.
(10) Conduce un auto seguro
Pon atención al vehículo que conduces. El auto es tan importante como el conducir en sí. Por lo general, en caso de accidentes, los Coches pequeños no brindan gran protección y las camionetas SUV tienen mayor probabilidad de volcarse.
Si estás pensando en comprar tu propio vehículo, trata de comprar uno cuya clasificación de seguridad sea alta (bolsas de aire, puntos de choque, etc.).
“Campaña de seguridad vial de joven a joven”
“Teniendo en cuenta que en México que los siniestros de tránsito son la principal causa de muerte entre los menores de 35 años y que los estudiantes son parte de esa población, queremos que los alumnos hagan una campaña de jóvenes para jóvenes”,
“Porque hasta ahora lo que se ha intentado desde las generaciones mayores no ha dado buenos resultados, entonces ahora intentamos saber qué pasa cuando los propios jóvenes mandan el mensaje a los jóvenes”
CONCLUSIONES
En el marco de la prevención de accidentes entre universitarios y del marco teórico de protección civil nacional, estatal y municipal hago hincapié en la vida de todo ser humano que conduce un automóvil sin las debidas precauciones y la responsabilidad absoluta de que pone en riesgo vidas ajenas y propias. Que el conducir un automóvil debe de convertirse en un arte y no en un juego de niños con el objetivo de no respetar ya que si mueres en un accidente automovilístico o en el rol de peatón eres atropellado en cualquier etapa de tu vida solo pasa eso mueres y ya. Sin embargo como lo declara este trabajo la prudencia del conductor, la precaución del peatón, y el esmero de poder despertar la conciencia de las personas derivara en un alto porcentaje de vidas salvadas.
Pudiera parecer que este trabajo no compita con ningún trabajo de investigación de alguna patología que pudiera presentarse en los jóvenes universitarios. Pero como lo demuestran las estadísticas antes presentadas podemos decir que los accidentes de cualquier tipo y aun mas los automovilísticos aunados a altas velocidades y la ingesta de alcohol, la imprudencia la falta de pericia y la falta de responsabilidad hacen que el conducir parezca como un seguro a tu tumba y a la tumbas de terceras personas.
Es por esto que he invertido mi tiempo de investigación en este trabajo para poder demostrar que no se necesita de una enfermedad para que un joven muera. Si no que un accidente mata y que en el ámbito epidemiológico se demuestra que el índice es alto y alarmante.
Inteligente pauca
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