Una de las formas en que las jóvenes de hoy pueden evitar ser víctimas de la violencia doméstica es observando con mucho sentido crítico algunas señales evidentes que se presentan durante el noviazgo. Esto no es fácil de hacer ya que normalmente la etapa previa a un casamiento, es la etapa del enamoramiento. Les ilustro lo anterior con una historia real.Susana y Carlos se enamoraron cuando ambos rondaban los 19 años. Su noviazgo duró aproximadamente 4 años. Finalmente fijaron la fecha de la boda. Cuando comunicaron los planes a sus padres, Ernesto el padre de Susana se dio tiempo para hablar con ella.- ¿Es Carlos el hombre con el que quieres pasar el resto de tu vida? Cuestionó Ernesto.- Sí papá –respondió Susana- es un buen muchacho, tú lo conoces.- Precisamente por eso te lo digo –replicó Ernesto- me preocupa que en algunas ocasiones lo he visto tomar en exceso y también lo he visto perder el control e incluso agredir a alguno de sus acompañantes.- Ay papá, no te preocupes. Carlos me quiere mucho y yo sé que lo haré cambiar cuando ya estemos casados.Las palabras de su padre pusieron pensativa a Susana. El comportamiento de Carlos para con ella no había sido de lo mejor en los últimos meses. En algunas ocasiones cuando el traía algunas cervezas encima habían discutido agriamente y dos veces incluso la había jaloneado lastimándola. Por supuesto que Susana nunca había comentado tales incidentes a su familia.Cinco años después de casados, Ernesto y sus dos hijos rescataron con vida a Susana, quien era frecuentemente golpeada por Carlos, lastimándola severamente. La joven esposa comprobó que no es fácil cambiar a un hombre cuyos hábitos están arraigados. Las estadísticas dicen que en uno de cada tres matrimonios existe la violencia en alguno de sus tipos y en numerosos casos esa violencia es fatal.Muchas mujeres están viviendo ese mismo problema actualmente. Durante el noviazgo se dan cuenta de que su novio bebe en exceso, está endeudado hasta la coronilla, anda en malas compañías, tiene algún tipo de adicción, es irascible y violento, abusivo, irresponsable, mentiroso, etc.. La lista de problemas es interminable. Pero están tan enamoradas que de buena fe creen que por amor o por arte de magia, su novio va a cambiar tan pronto se casen. Podría asegurarles que en el 99 % de los casos se equivocan rotundamente y que ignorar dichos inconvenientes les van a traer serios dolores de cabeza que se pueden convertir en un calvario para el resto de sus vidas.Como decían nuestras abuelas: “Más vale hijita que te regreses del altar” y no que arruines tu vida por ignorar tales señales. Espero que muchas jóvenes inteligentes tomen en cuenta el consejo.
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tODOS SUS ARTICULOS ESTAN SUPER!!!! realidades, no cuentos ni fantasias es lo que nos transmite SR. SAMUEL, no tuve esas experiencias tan dificiles, pero nunca es tarde para recibir estos articulos, que bueno seria que todas las jovenes se nutrieran con estas experiencias, no hubiera tanto maltrato fisico, emocional y todo tipo de abusos, ya es hora de que se acabe tanto mal que aqueja a la mujer, bueno tambien a los hombres en algunos casos!!! . FELICITACIONES Y SIGANOS compartiendo estos interesantes articulos.,
Yo por ejemplo si he vivido no solo 1 sino 3 noviazgos en los que he sufrido maltrato, afortunadamente me dí cuenta de que había estado siguiendo un patrón de hombres de ese tipo, comencé a tomar terapia psicológica y pues claro que no es mágico yo cambié y me moví de lugar totalmente, ahora a casi 3 años de comenzar la terapia soy una mujer totalmente renacida, que ha aprendido a valorarse y a darse su lugar, no sólo frente a los demás sino frente a mi misma.
Tengo novio al cual le he puesto límites los cuáles ha respetado, y estoy siendo muy feliz, las decisiones que tomo las tomo con conciencia de lo que quiero y también de lo que no quiero.
Margarita tiene razón cuando dice "UNA BONITA RELACIÓN ES DE AMOR, COMUNICACIÓN, TOLERANCIA, SENTIDO DEL HUMOR Y DE LA RESPONSABILIDAD..." yo le agregaría respeto, libertad y de dar el lugar, no sólo recíproco es decir el uno al otro sino de un@ mism@ hacia un@ mism@.
Primero yo, luego yo y al último yo (no al extremo sino encontrar el balance JUSTO)
Estimado Samuel,
Efectivamente, hay varias señales previas pero con la idea de VOY A CAMBIARLO se piensa que es la solución... La gente no cambia. Si en la etapa de noviazgo (cuando es el momento que tratan de quedar "bien" o estan enamorados)no lo hacen, mucho menos de casados...
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Yo por ejemplo si he vivido no solo 1 sino 3 noviazgos en los que he sufrido maltrato, afortunadamente me dí cuenta de que había estado siguiendo un patrón de hombres de ese tipo, comencé a tomar terapia psicológica y pues claro que no es mágico yo cambié y me moví de lugar totalmente, ahora a casi 3 años de comenzar la terapia soy una mujer totalmente renacida, que ha aprendido a valorarse y a darse su lugar, no sólo frente a los demás sino frente a mi misma.
Tengo novio al cual le he puesto límites los cuáles ha respetado, y estoy siendo muy feliz, las decisiones que tomo las tomo con conciencia de lo que quiero y también de lo que no quiero.
Margarita tiene razón cuando dice "UNA BONITA RELACIÓN ES DE AMOR, COMUNICACIÓN, TOLERANCIA, SENTIDO DEL HUMOR Y DE LA RESPONSABILIDAD..." yo le agregaría respeto, libertad y de dar el lugar, no sólo recíproco es decir el uno al otro sino de un@ mism@ hacia un@ mism@.
Primero yo, luego yo y al último yo (no al extremo sino encontrar el balance JUSTO)
Efectivamente, hay varias señales previas pero con la idea de VOY A CAMBIARLO se piensa que es la solución... La gente no cambia. Si en la etapa de noviazgo (cuando es el momento que tratan de quedar "bien" o estan enamorados)no lo hacen, mucho menos de casados...
Gracias x compartirlo!!!