"Debemos de creer con fuerza en un objetivo, y ser objetivo con nuestra fuerza para realizar lo que creemos". La frase anterior es buena ponerla en práctica para lograr nuestros objetivos en la vida.

Pero valdría la pena preguntarnos: ¿Qué calidad de vida le estamos dando a nuestra existencia? Hoy, no mañana, podemos empezar a vivir en plenitud, si aprendemos aplicar conceptos positivos y ponemos a funcionar estas doce reglas en nuestra vida.

1.- "Tener una mentalidad positiva", para aplicarla en nuestra vida cuando tengamos problemas. La frase de Henry Ford: "Fracasar es la oportunidad de comenzar de nuevo con más inteligencia". No olvidemos que en la vida sólo existen excusas y resultados. Hoy ¿en qué plan estás?

2.- "Debemos de velar por nuestra salud y vigilar nuestra condición física". Creemos que estamos muy sanos, y tal vez la muerte nos está pisando los talones, y llevamos un cáncer en gestación o un infarto en vías de realizarse. ¿Cuándo fue tu último control médico? Hace 10 meses me operaron de la rodilla, y pensé que nunca iba a volver a caminar como antes, y ahora, la salud me sonríe,  pues camino rápido y fácil.

3.- "Hay que buscar una armonía en nuestras relaciones humanas". ¿Qué tanto estamos viviendo en armonía con nuestra familia? ¿Con nuestro prójimo y en el trabajo? Si no valoramos el convivir con nuestros semejantes, seremos seres aislados y nuestro egoísmo nos irá dejando ermitaños en la soledad, y llevaremos una vida vacía. "Hay que vivir para servir".

4.- "Tratar de liberarnos de toda forma de temor". Porque el temor y el miedo son frenos para vivir nuestra existencia en plenitud, y disfrutar de la vida. Teresa de Calcuta decía que el miedo es el peor enemigo para ser felices. ¿Hoy vives con temor o en el amor?
5.- "Vivir con esperanza y tener ilusiones". Bien lo resume en un párrafo el Lic. Jorge Peniche cuando dice: "Estrena una ilusión todos los días, ábrele una ventana a la esperanza. Nunca pierdas la fe ni la confianza, la vida hay que llenarla de alegría".

6.- "Tener Fe en Dios y ponerlo siempre de primero en nuestra vida". Cuando tenemos fe, la vida se nos presenta bella, y vemos los problemas como oportunidades para nuestra superación. La fe genera confianza, y la confianza alegría  por vivir.

7.- "Tener disposición para compartir con nuestros semejantes todo lo que la vida nos regala". Tal tienes el mal del bien ajeno, por eso eres una persona infeliz. Hay que ser donadores de la alegría, porque al dar en como recibimos, y al compartir es como nuestra vida se llena de amor, alegría y entusiasmo.

8.- "Llenar nuestra vida con amor, respeto y diálogo". Son los tres pilares donde puede descansar nuestra felicidad. Porque el amor alimenta el espíritu; el respeto nos da paz y serenidad; y el diálogo es el camino más corto para solucionar nuestras diferencias.

9.- "Mantener una mente creativa y nutrirla a diario de lecturas positivas e ideas constructivas". Tal como pensamos seremos. Y de acuerdo con nuestros actos serán nuestros pensamientos. Yo en lo particular, trato de leer un capítulo de alguno de mis libros todos los días, para no dejar que me gane el derrotismo y me llene de pesimismo.

10- "Tratar de tener dominio de tus pensamientos y sentimientos". Eso nos llevará a tener un control en todas las circunstancias de la vida. El control mental y la relajación, son armas que tenemos en nuestra mente, y de nosotros depende ejercitarlas.

11.- "Tratar de comprender y aceptar a nuestros semejantes". Ellos no van a cambiar, nosotros al aceptarlos, los haremos cambiar. La dinámica del cambio en nuestras vidas es frenada por el miedo. ¿El día de hoy estás en plan de cambio y... por miedo no lo haces?

12.- "Tener una capacidad en lo económico para poder satisfacer nuestras necesidades". Sin perder el equilibrio entre el Ser y el Tener. Porque es muy fácil volverse esclavo del dinero, y sacrificar nuestra existencia en ser adoradores del becerro de oro.

Estas doce reglas para la vida, si las logramos aplicar, nos daremos cuenta que "no somos un ser humano con una experiencia espiritual; sino que somos un ser espiritual con una experiencia humana". Entendiendo que el alma no crece cuando le sumamos, crece cuando le restamos. Bien lo resume en una frase Goethe: "El talento se nutre con la soledad, y el carácter se forma en las oleadas tormentas del mundo".