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La alimentación también es una herramienta para proteger la piel, por ejemplo, el consumo de zanahoria rico en vitamina A y betacatorenos

Si no se toman precauciones a la hora de tomar el sol éste puede lacerar la piel, una de las consecuencias más graves es la aparición de manchas en la piel.

«Estas son las manchas de exposición solar crónica aparecen a partir de los 40 en personas de piel clara y que han tenido mucha exposición; aunque la gente las llame “de la edad” son manchas solares», explica la doctora Gloria Abad.

Asimismo, Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia destacó la exposición al sol como detonante de la hiperpigmentación. «Una exposición excesiva de la piel al sol, sin la debida protección, genera una gran producción de melanina, que se traduce en manchas en la piel».

Al respecto, el doctor Enrique Herrera, jefe del servicio de dermatología de los hospitales Vithas Xanit y Vithas Málaga recuerda que «debemos evitar (la exposición solar) las horas centrales del día, usar medios físicos como gorros, sombreros, camisetas y gafas, y utilizar protectores solares con un factor de protección de al menos 30».

La alimentación también es una herramienta para proteger la piel, por ejemplo, el consumo de zanahoria rico en vitamina A y betacatorenos o « alimentos ricos en vitamina E, como los frutos secos o el aguacate, contribuyen a reforzar el sistema inmunitario y reparan el daño producido por el sol», detalló la doctora Abad .

No hay que olvidar, desde luego, evitar el uso de protector solar caducado y exponerse a la luz solar cuando la piel tiene heridad.

Publicado originalmente en mi portal Editorial Salud y Bienestar Total

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