CUANDO EL DOLOR DEL DIVORCIO HABLA...

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PLUMA AL VIENTO
 
Por Diana Alejandra Aboytes Martinez
En un sombrìo atardecer violeta, la soledad quiso asomarse desde un sitio cercano.
Sin sal ni arena, sòlo la brisa llevàndose una pluma blanca en los labios.
Nunca supiste capturar el sol de mis noches y, en el dia te era imposible contemplar las estrellas junto a mì. Necesitabas verme perdida para quererme màs... pero es tarde.
El llanto estrangula mi garganta encadenando el correteo de mis palabras. No obstante, las hago libres sobre pàginas rotas y las convierto en mantel.
Me dueles por lo que un dia fuiste, màs ya no arde mi hoguera junto a ti.
La noche cayò y sòlo quedan restos de esta historia que agoniza.
Debemos sepultarla donde reposa el color del silencio y el polvo del tiempo envuelva la piel de nuestra memoria.
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Comentarios

  • Karìn Meffert....

    Tienes razón en sugerir la no critica hacia el compañero q un dìa elegimos.

    Como bien dices, habremos de analizar q fue lo q nos hizo tomarlo por pareja y ver nuestras propias carencias a fin de no volver a tropezar con algo similar.

    El tiempo de duelo ah de suceder y q la vida nos siga dando amaneceres q hemos de recibir vestidas con una sonrisa.

    Namastè.

  • Mary Herrera...

    Agradezco enormemente tu compartir.

    A veces creemos ingenuamente, otras tantas no queremos ver la realidad.

    Lo importante aquí es que, a tropiezos aprendemos y crecemos a base de un poco de dolor.

    Ahora a renacer y comenzar con el regalo de la experiencia.

    Te regalo un cálido abrazo para el camino.

  • No critiquemos al otro, él o ella deben ocuparse de su propia evolución.  Más bien debemos hacer una introspección de por qué escogimos a esa persona y permitimos lo vivido. Ahí es cuando evolucionamos y crece nuestro ser, nuestro espíritu. El dolor es inevitable, pero sufrir es nuestra propia decisión. 

  • El dolor del divorcio habla y nos abre los ojos nos hace sentir que no todo fue color de rosa nos ayuda a darnos cuenta que también nos equivocamos y poder rescatar la relación pero cuando no hay vuelta atrás es como si nos quitaran un pedacito de carne que duele hasta el alma,  yo tuve dos relaciones en una tuve un hijo su padre lo abandono y no se hizo responsable tuve que regresar a casa de mis papás  tenia miedo a otra relación pero me decidi y vivi en union libre por 5 años fue un grave error creer que un hombre casado por más de 18 años se iba a divorciar , tenia a su esposa y a mi como amante y despues de 3 años me voy enterando que no se iba a divorciar para no causarle dolor a su esposa e hijos sin embargo yo permiti que me hiciera daño y finalmente decidi salirme nada era mio y fue un trago amargo, llore suplique me humille pero nunca más asi que han sido como dos divorcios y ahora decido vivir sola con mi hijo sin compromisos y si llega alguien bienvenido eso ahora me valoro y me amo más 

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