Lucas 7:11-15 “Aconteció poco después que Jesús fue a una ciudad llamada Naín; y sus discípulos iban con El acompañados por una gran multitud.  Y cuando se acercaba a la puerta de la ciudad, he aquí, sacaban fuera a un muerto, hijo único de su madre, y ella era viuda; y un grupo numeroso de la ciudad estaba con ella.  Al verla, el Señor tuvo compasión de ella, y le dijo: No llores.  Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron. Y Jesús dijo: Joven, a ti te digo: ¡Levántate!

El que había muerto se incorporó y comenzó a hablar, y Jesús se lo entregó a su madre.” 

En algún momento de nuestra vida a causa de experiencias duras y amargas que nos ha tocado vivir a causa de nuestra desobediencia o por los designios de Dios hemos tenido que derramar lagrimas, y el detalle no es el llorar por ese dolor, sino mas bien, que pase el tiempo y sigamos llorando por la misma razón; por el mismo dolor y es en ese momento cuando sin saberlo sentimos y nos volvemos esclavos de ese dolor.
Puede ser tal vez cosas que perdiste en tu vida las cuales todavía dentro de ti pareciera que fue ayer que te pasaron y por eso aun lloras pero, hoy te digo de parte de Dios, NO LLORES más, Jesús está dispuesto a sanar esa herida con su Amor y Misericordia y devolverte lo que se te perdió. 

“Y cuando el Señor la vio, se compadeció de ella, y le dijo: No llores”. Lucas 7:13 

Esta mujer había perdido a su esposo y aparte de ello a su único hijo y por esta causa lloraba.

Hoy te pregunto ¿Qué has perdido en la vida que te ha dejado llorando durante todo este tiempo?,

¿Cuál es la herida que tienes dentro de ti la cual todavía no ha sanado?

¿Que estabas pensando enterrar?

Tal vez llevas mucho tiempo (días, meses, años) con un dolor porque alguien te fue infiel, o con el dolor de haber causado daño a alguien que amabas, o con el dolor que te ha causado un hijo rebelde, o por aquella mala decisión que tomaste en tu vida y perdiste todo (Hogar, Trabajo, Empresa, etc.); pero déjame decirte que Hoy Jesús se presenta a ti a través de este mensaje diciéndote, NO LLORES MAS, ya basta de LLORAR, ya basta de estar triste, ya basta de vivir amarrado a esa herida del pasado, ya basta de vivir afligido, porque lo que fue ya fue, lo que hiciste, lo que te hicieron, lo que se murió ya paso. 

Mira esta mujer a la que se refiere esta palabra de Lucas 7, creía que todo estaba perdido, es más te aseguro que pensó que ya no tenía motivos para vivir, pero fue allí en donde Jesús aparece en la escena, y le dice MUJER NO LLORES. Amigos es hora de que sepas que hoy Jesús ha venido a tu vida con el firme propósito de Sanarte, de Levantarte, devolverte tu Paz, tu Gozo y tu Felicidad, de Devolverte lo que llevabas a enterrar.

Él se ha compadecido de tu dolor; aunque la persona que amas (Padre, Esposa, Hijo), o el pastor, el vecino, tu amigo o sea quien sea no le interese el dolor por el que estés pasando o viviendo, hay un Dios todo poderoso al cual si le interesas, Hay un Dios que se hizo Hombre el cual conoce el dolor de la traición, hay un Dios el cual conoce el dolor de la separación y por eso Tiene el Poder no solo para compadecerse, sino, para sanar tus heridas y sacarte del hoyo en el cual estas, el asunto es que quieras salir de él, por eso Él te dice NO LLORES.

¿Que estabas pensando enterrar?

Hoy Jesús se acerca a Ti y quiere decirte no te quedes esclavo de tu pasado de dolor; ya NO LLORES mas, es tiempo de levantarse, es tiempo de salir adelante, es tiempo de ir en busca de cosas mejores; deja que el señor te Sane, te Levante y te devuelva lo que parecía imposible de recuperar ríndete a Él y permítele que su propósito se cumpla en ti para su gloria

Jesús te dice en este momento, NO LLORES. Deja que el Maestro te consuele a través de su Santo Espíritu, deja que el Médico de Médicos sane las heridas que hay en tu alma, deja que Jesús el Rey de Reyes ponga su Mano de Poder y sane esa llaga que durante tanto o poco tiempo te ha hecho llorar.