Blogs

Que pasaría si el destino fuera benévolo contigo y te dijera que: hoy es el último dia de tu vida, tienes 2 horas para:  depedirte, sonreir, besar, acariciar, abrazar, agradecer, perdonar, disculparte, ver el cielo, admirar las flores, bailar bajo la lluvia, ayudar al desvalido, cobijar al que tiene frío, alimentar al que tiene hambre, concluir todo aquello que vas dejando inconcluso.

Sin temor a equivocarme sé que correrías hacia tus hijos, pareja, padres, mejor amiga o amigo y les darías un enorme abrazo gritando mil veces lo mucho que los amas, lo orgullosa que estas de ellos y no dejarías de mirarlos, disfrutarlos e implorarles perdón por todo aquello que no hiciste en su momento.

Te tengo 2 noticias una buena y una mala, la BUENA es que  TOOOODO  esto es gratuito y lo podemos hacer cada segundo ante cualquier ser humano que cruza por nuestros caminos, cada persona es merecedora de ver en nosotros una cara agradable, una palabra amable, un trato cortés y sencillo, una sincera sonrisa que le alegre el día ante cualquier circunstancia. La MALA  es que debemos pasar por experiencias amargas y de inseguridad para intentar ser personas con otra misión en la vida, eso nos da la pauta para querer enderezar el camino, pero no por convicción sino por cargo de conciencia de todo aquéllo que hemos evadido. Pero nunca es tarde para darle una nueva dirección a nuestra existencia, hoy te invito a que abraces, beses y disfrutes al máximo a todas esas lindas personas que le dan razón a tu existencia, pero también al que te carga gasolina, al que te pide una limosna, al que te cede el paso, al que te saluda, al que te ignora, al que te agrede, al que te maldice, solo date la oportunidad de vislumbrar el poder de una sonrisa en tu vida y en la de los demás independientemente de  lo que transmites al ser una persona de luz.

Recuerda que cuando sabes que vas a dejar de existir por algun diagnóstico médico o alguna otra circunstancia, te esmeras por cuidar el mínimo detalle y al mismo tiempo le suplicas a la ESPERANZA que exista en tu vida como escudo fiel de protección ante cada obstáculo que se te presente. Lo último que se debe perder es la esperanza,  ya que ella lo es todo.

Espero que te des la oportunidad de sonreir a todo el que se cruce por tu vida y me cuentes tus mágicas experiencias que estoy segura tendrás. Dios te bendiga e ilumine tu camino. Hasta el próximo martes.