Hace unos años el filósofo Alain de Botton fundó la llamada School of Life, una escuela para la vida en la que artistas, escritores y educadores, entre otros, comparten sus visiones sobre el arte de estar en el mundo, una asignatura en la que uno nunca se gradúa.
Por mucho que hayas vivido, cuando crees haberlo visto todo, la existencia te sorprende con nuevas pruebas, revelaciones y momentos, todos ellos únicos e irrepetibles. Mientras estemos vivos, en todos los sentidos, esta escuela no hará vacaciones.
El entrañable Jose Luis Sampedro decía que la mayoría de la gente “hace muchas cosas, se mueve todo el día, está agitada todo el día, y no sabe vivir.” ¿A qué se refería este sabio con saber vivir? Básicamente en descubrir cuál es nuestra misión, nuestro proyecto de vida.
Más que saber por qué estamos aquí, necesitamos descubrir para qué vivimos.
Si no lo sabes todavía, la existencia se encargará de enseñártelo si tienes los ojos abiertos y te abres a las enseñanzas del mundo. Estamos aquí para aprender. A ver si pasamos curso.
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