Las nuevas tecnologías de la información y la informática han avanzado tan vertiginosamente, que se han convertido en instrumentos indispensables para formar ya parte de nuestra vida cotidiana.
Quién no acude y se auxilia en estos días, por ejemplo, lo mismo con el Internet, WhatsApp, Twitter o el Facebook, para comunicarse e integrar lo que llamamos hoy las redes sociales. O bien la propia lectura de libros virtuales, a los que me referiré especialmente, pues es evidente que empiezan a ocupar un sitio significativo en nuestros hábitos y costumbres.
Si bien México, empieza a inscribirse apenas entre un 5% 8% del total del mercado de la venta de libros, en otros países de mayor desarrollo, el libro que se lee en una Tablet o en un dispositivo especial para la lectura, representa un 30%, como es el caso de Inglaterra, dentro del total de la industria editorial.
La explicación es que en México, como ha ocurrido con otras nuevas alternativas o modalidades, siempre llevamos rezagos comparativamente con lo que se registra, por decir en el país vecino de Estados Unidos, donde los avances de lectura del libro virtual son mayores y de una extensión social considerable. Queda claro, por lo mismo, que tiene un gran futuro en nuestro país conforme transcurran los años.
Así, el segmento o el nicho del mercado en cuestión irá creciendo significativamente.
Justo, en nuestro caso, existe una organización empresarial que es pionera y ejemplar en este campo. Me refiero a editorial INK que inicia sus actividades hace un par de años y es ya una positiva realidad. Cuenta a la fecha con casi 100 autores y con más de 500 títulos, además de cientos de miles de visitas en su conjunto. Entre los escritores que aparecen dentro de su atractivo catálogo hay varios que son muy conocidos y reconocidos, como: Hernán Lara Zavala, Guadalupe Loaeza, René Avilés Fabila, Beatriz Espejo, Isabel Custodio o Alejandro Ordorica, entre otros. Así también, en lo personal tengo el privilegio de formar parte del listado de sus autores de Editorial INK, que dirige con talento, visión y eficacia su fundadora Ana Lilia Cepeda, así como su director, Diego Echeverría.
Se trata de libros que además presentan la gran ventaja de que cuestan aproximadamente un 30% menos del costo de los libros impresos, que son interactivos, que conllevan la voz de los autores y hasta con la posibilidad de que los lectores pongan notas personales en sus páginas y otras atractivos y ventajas adicionales.
Hay a la vez, series constituidas exprofeso cómo puede ser la que se refiere a breves biografías o hechos históricos que llevan el prefijo “En 10 pasos conoce a …”, lo mismo el Dalai Lama o sobre la Segunda Guerra Mundial. Y así otras colecciones muy interesantes y amenas que abordan temas de historia, salud, gastronomía, superación personal o la literatura infantil y juvenil.
Asimismo, estimulan la creación literaria y crearon recientemente el Premio de Novela (virtual) en el que han participado cientos de escritores de México y del mundo. Este año será la tercera vez que se celebre.
En fin, una empresa mexicana que tiene ya una presencia muy importante aquí y a nivel internacional, por nexos y convenios con grandes distribuidoras de libros como Amazon o Apple, muy acordes con la globalidad que marca nuestros días.
Una empresa pues, promisoria y de avanzada, que es ya es un referente dentro y fuera de nuestras fronteras en el universo del libro virtual
¡Enhorabuena!
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