LAS "SOBRAS" DEL SEXO

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Dr. Carlos J. Correa Bernier

Terapista Familiar y Matrimonial

Las siguientes palabras tratan acerca de los problemas elegantes y difíciles,  producto de las relaciones emocionalmente significativas. Personalmente, he vivido admirando la increíble elegancia y extraordinaria complejidad que definen a nuestro mundo natural y a la belleza que enmarca a los ecosistemas que nos rodean, incluyendo los sistemas que definen nuestras relaciones románticas. Son las relaciones románticas las que proveen a nuestra especie con el tipo de experiencias que son capaces de llevarnos a trascender nuestras tendencias hacia el instinto. Ya sea que estemos hablando de las complejidades de los mundos microscópicos, o de todo lo desconocido en las diferentes galaxias de nuestro sistema solar, o de todo lo maravilloso que define el mundo de la genética, todos parecemos estar de acuerdo al momento de admirar la complejidad, belleza e inteligencias de todo aquello que parece transcendernos. Cuando pensamos en todos los demás universos que nos rodean el nuestro parece ser uno profundamente insignificante.  

Así también son las relaciones emocionalmente significativas. Una de mis observaciones favoritas, acerca de la ecología de las relaciones románticas, es el hecho de que cada relación cuenta con sus propias reglas, así como los otros mundos en la ecología natural tienen las suyas. Ambas, la ecología natural como la ecología de las relaciones románticas, son sistemas que se auto organizan. Y en ambos casos, tanto en el mundo de madre naturaleza como en el mundo relacional, existen reglas pre-establecidas por los que fueron antes que nosotros.     

Las personas que son parte de relaciones emocionalmente significativas son personas en desarrollo, formando parte de un crecimiento continuo. La ecología relacional de los seres humanos parece haber sido diseñada con el desarrollo de nuestro “ser” en mente. Es extraordinario saber que tal desarrollo es posible, independientemente de la etapa existencial en la cual nos encontremos. Es instructivo saber como sucede. Entender los motivadores de nuestras relaciones significativas nos ayuda a ser más intencionales al momento de involucrarnos en las dinámicas románticas con las persona que amamos. De igual manera, nos ayuda a estar más conscientes de los elementos que sostienen dicha relación y de las herramientas relacionales que hemos acumulado a través de los años.

Los aspectos cruciales y profundos de nuestras relaciones podrían ser celebradas de manera breve y memorable. Mientras celebramos nuestras respectivas relaciones deberíamos de tomar tiempo para pensar en los aspectos sexuales de las mismas.

Considere lo siguiente: las relaciones sexuales entre dos personas que se aman siempre consisten de sobras. En tal propuesta pretendo encapsular varios aspectos relacionales, a los que sugiero deberíamos prestar más atención y dar más importancia. Los aspectos relacionales a los cuales me refiero son los siguientes:

  • La manera en como nuestras relaciones sexuales son iniciadas.
  • La manera en como la iniciación sexual de la pareja perpetúan las dinámicas que posteriormente definirán la relación como una sexual.   
  • La manera como los adultos llegan a ser personas sexualmente maduras.
  • La manera como las relaciones sexuales llegan a desarrollar profundidad, flexibilidad, intimidad y significado como parte de las dinámicas relacionales de la pareja.

¿Por qué se transforma el sexo en una actividad aburrida?

¿Cuáles son las razones para el aburrimiento sexual en las parejas? Como ya sabemos, todos los días somos inundados con recomendaciones acerca de cómo recuperar la pasión en nuestras relaciones sexuales de pareja. Si las   recomendaciones de los expertos son tan efectivas, ¿por qué no nos funcionan? ¿Será que somos demasiado tontos, o indeterminados, como para poner en práctica lo que los supuestos expertos dicen debiéramos hacer? Por otro lado, ¿cuál es la razón por la cual los expertos parecen vivir bajo la presión del mismos tipo de problemas relacionales que prometen nos ayudarán resolver?

Muchos han establecido que el aburrimiento sexual es el resultado directo de la falta de inventividad y falta de ideas entre los miembros de una relación. Yo difiero de tal propuesta. La verdad es que la mayoría de las personas que viven bajo el impacto del aburrimiento sexual se la pasan cultivando nuevas ideas  pues como sustituto a una vida sexual dinámica pasan tiempo mirando páginas y películas pornográficas en el internet. ¿Cuál, entonces, es la razón por la cual se les hace imposible traducir sus ideas eróticas en acciones concretas? Todo se debe a la manera en como la pareja inició la práctica de las relaciones sexuales entre ellos.  

¿Por qué nuestra vida sexual consiste de “sobras”?

Para tratar de entender el proceso a través del cual la mayoría de nosotros decidimos establecer los patrones de relaciones sexuales “normales” en nuestra relación deberemos de pensar en un proceso dividido en por lo menos tres escenas:

  • Escena 1: Decidimos que es lo que no deseamos hacer.
  • Escena 2: Nuestra pareja decide que es lo que él o ella no desea hacer.
  • Escena 3: Iniciamos nuestras vida de relaciones sexuales con lo que nos sobró después de las escenas 1 y 2.

Después de eliminar todas las opciones sexuales que les hacen sentir incómodos, o las actividades sexuales que simplemente no desean practicar, ¿qué les queda? Las sobras! Y así es como las mayoría de nosotros hemos establecido, e iniciado, lo que hemos categorizadas como relaciones sexuales “normales.” Así de simple, o así de complejo, dependiendo de su perspectiva.  

Este tipo de negociación sucede de manera espontanea. En la mayor parte de los casos, ninguna de las dos personas se atreve hablar sobre el asunto. Jamás se atreverían negociar con su pareja. En algunas ocasiones, la pareja sabe lo que está sucediendo y lo que están haciendo, en otras, ninguna de las dos personas tiene la más mínima idea del por qué su relación íntima ha llegado a ser el cúmulo de encuentros aburridos que llevan a cabo más por tradición o costumbre, que por deseo.

En retrospección, creo que todos seriamos capaces de identificar el periodo de tiempo cuando nuestra relación pasó por un periodo de aburrimiento sexual.  

Integramos el aburrimiento sexual como parte de nuestra “normalidad” sexual:

Subsecuentemente, el impacto de la insatisfacción existente afecta todas las extremidades de la relación, pero muy especialmente el bienestar sexual de la pareja. Si no me cree, dedíquese a “comer sobras” en cada ocasión que tenga sexo con su pareja. Hágalo por los próximos cinco años (menos años para la mayoría), y le garantizo que tanto usted, como su pareja, sentirán que se mueren de aburrimiento relacional, especialmente si no cuentan con un buen abastecimiento de “sobras” con las cuales matar el tiempo.  

Lo más lamentable de la condición de aburrimiento sexual es cuando definimos nuestra condición de aburrimiento como lo normal, o cuando nos atrevemos   entender el aburrimiento sexual como parte del ciclo de desarrollo de todas las relaciones románticas. Esta es la razón por la cual muchos, y muchas, le huyen a la monogamia como si fuera una plaga bubónica.

Sin poder explicar las razones de su presuposición, muchas personas han llegado a la conclusión que establece que una relación estable y dedicada lo único que logra es mutilar el potencial y espontaneidad sexual entre dos personas. Pero, olvidemos por unos segundos las explicaciones simples y triviales que nos dicen que el aburrimiento sexual surge como resultado de estar “con la misma persona”.  

Olvidemos las explicaciones innecesarias y consideremos la metodología a través de la cual definimos las expectativas de nuestras relaciones. El hecho de que usted y su pareja sientan la obligación de tener que comportarse de manera “normal,” en lo que a las relaciones íntimas se refiere, es uno de los elementos más nocivos que puede llegar a existir entre dos personas que se aman. ¿Por que nos sentimos obligados a limitar nuestra vida sexual basados en las expectativas de una supuesta normalidad que nadie sabe como explicar?

¿Se considera ser una persona normal? ¿Sí, no? ¿Por qué insistimos en exigir que una supuesta normalidad nos siga hasta en los momentos más íntimos con nuestra pareja?

Vuelvo y les comento, después de mis muchas conversaciones con parejas y después de haber vivido mis propias experiencias de aburrimiento sexual en mi relación, me atrevo a decir sin temor a equivocarme que nuestra sexualidad depende de las sobras, especialmente si usted es una de esas personas que siente la necesidad de querer controlar a otra.

Les invito a que mediten en la propuesta que aquí les comparto y a que compartan conmigo sus impresiones, comentarios, recomendaciones o desacuerdos. Puede enviar sus comentarios a contacto@conversemos.com.

Será hasta la próxima, hasta entonces, adiós!

Los artículos compartidos a través de las publicaciones de Conversemos son producidos con intensiones educacionales solamente y no han sido diseñados con la intensión de reemplazar la atención de un profesional de la salud mental y/o relacional.

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Comentarios

  • ¡Hola de nuevo!

    Gracias por la respuesta, estoy de acuerdo, es necesario crecer para poder ser personas individuales. También agregaría conocernos en todos los sentidos, en lo físico, para saber donde sentimos más placer, también en lo emocional, para saber que nos gusta, en fin en todos los aspecto de nuestra maravillosa individualidad.

    ¿Gracias nuevamente!

     

  • Hola Consuelo,

    Muchísimas gracias por leer y por su pregunta. Mi propuesta en el artículo es que, como seres sexuales, deberíamos de ser también seres inventivos y libres, a tal grado, que como parejas cada uno de nosotros deberíamos de sentirnos libres de crear, mantener y sostener nuestra propia cultura sexual, en lugar de sentirnos obligados a seguir parámetros impuestos por otros, otras y la sociedad.

    Con relación a personas controladoras me referí a las a precisamente eso... a personas que son tan "adictas" a una relación que son incapaces de vivir sus propias vidas internas, de sentir lo que desean y lo que sueñan y quienes dedican a vivir sus vidas desde el exterior, tratando de manejar las vidas de otros/as, mientras se niegan a vivir las suyas.

    Sigamos conversando. Gracias por leer.

    Dr. C.J. Correa Bernier
    Terapista Familiar y Matrimonial
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  • ¡Hola! haber si entendí: ¿es necesario tener más flexibilidad en nuestra actuar al tener relaciones sexuales, para no caer en la monotonía? Además ¿qué una persona controladorá será aquella que decida como tener relaciones sexuales?

  • Muy interesante tus comentarios, voy a reflexionar " con respecto a este tema

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