LAS COSAS LLEGAN CUANDO TIENEN QUE LLEGAR

Hace tres años decidí comprar una casa. Después de varios meses de búsqueda encontré una residencia hermosa y acogedora en Los Angeles, California. Las calles del vecindario estaban adornadas con bellos sauces; manejar por este barrio daba la sensación de estar en un jardín encantado. Después de recorrer la propiedad le dije a mi agente de bienes raíces: “hagamos una oferta inmediatamente, ¡esta casa tiene que ser mía!”.

Lamentablemente dos días después sucedió algo inesperado. Los dueños de la casa decidieron no venderla. No podía creerlo. ¡Esta era la casa de mis sueños! Desilusionada y triste pensé: “no voy a encontrar otra casa que me guste tanto como ésta”.

Un mes después de esta decepción, me llegó una excelente oportunidad de empleo para transmitir mi propio programa de radio nacional desde Miami. Sin pensarlo, acepte y me mude a la ciudad del sol. ¡Que irónico!, si hubiera comprado aquella casa, hoy no estaría donde vivo. Es cierto que no tengo un jardín encantado, pero el sol, las palmeras y la vista al mar me hacen sentir en el paraíso. Además, inesperadamente también encontré el amor en esta nueva ciudad. Hoy doy gracias a Dios por no ayudarme a comprar “la supuesta casa de mis sueños”.

Estas cosas suceden en la vida, deseamos algo ardientemente pero no se nos da; un trabajo, un amor o una gran oportunidad que no podemos conseguir. En ese momento nos sentimos desilusionados o frustrados. Sin embargo, más tarde aparece algo mejor y nos damos cuenta que, lo que tanto queríamos, no era lo que más nos convenía.

Lo que está para ti, no llega en el momento que tú lo quieres, que tú lo decides o que tú lo pides, más bien llega cuando te conviene. Todo en esta vida tiene un orden divino, las cosas suceden en el momento preciso, no antes ni después.

Si hay algo que deseas y aún no llega es porque todavía no estás preparado para recibirlo o sencillamente no es bueno para ti. Ten calma y no te desanimes. Dios conoce tu situación, Él sabe exactamente lo que necesitas y te va a llegar en el momento apropiado.LAS COSA

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Comentarios

  • Excelente, gracias por recordarlo; cuanto trabajo cuesta asimilarlo; sin embargo, cuando llega lo anhelado, no hay conque dar las gracias por esa bendición, chicas, a esperar y practicar la paciencia, vale la pena. Saludos.

  • Muy buen articulo yo he entendido que por algo no llega lo que tanto deseas, es dificil y piensas porque no. Pero como dices hay que esperar tú momento. Graciad un gran saludo.

  • creo firmemente que así es, mi vida amorosa no ha sido buena, pero ya termine la relación, estoy tranquila y esperando el tiempo de Dios, y a la persona buena que el me mande...  no tengo prisa!  gracias, muy acertado los comentarios que expones aquí, saludos!!

  • hola  soy  rosy led tus comentarios son afirmativos, estoy pasando por situacines algo dificiles me gustaria porder comunicarme contigo a la brevedad  mi correo charitin2010@live.com.mx espero poder contartarnos  gracias  atte. rosy led

  • Gracias Mary, en mi vida he tenido muchos desencuentros, cosas que anhelaba que jamas han llegado pero ahora se que todo llega en su momento, muchas gracias.-

  • María: Estoy completamente de acuerdo con lo que nos dices en tu artículo. Durante toda mi vida he recibido tantas cosas en el momento justo, a Dios G R A C I A S. Oro porque  a todos nos llegue lo que anelamos en el justo momento  en que podamos recibirlo.

    Bendiciones Mary, para ti y para todos.

  • Muy cierto Dios tiene algo mucho mejor ya lo tiene planeado, y eso muchas veces nos cuesta comprender. En mi caso sucedió lo mismo soñaba con una casa muy grande no logre obtenerla pero Dios elegio la casa donde yo deberia de vivir, es pequeña pero me siento segura xq ahora valoro porque me fue muy dificil en situacion económica pero aun así el ya lo tenia planeado pues hasta para las escrituras me alcanzo y sin obtener sinero en efectivo. es un gran testimonio de cual Dios es grande y maravilloso. Me enseño que no necesito una casa grande para tenerlo a él , porque el esta conmigo-.

  • Gracias x compartir! Es cierto en momentos difíciles hay que aguantar un poquito para recibir lo que sigue. Nuestras abuelitas lo decían de este modo ( al menos acá en el norte) " no hay mal que no se acabe". Así que a luchar amigas lo bueno llegará en cualquier momento.
  • Así sea, creo que eso es lo que me sucede ahora.
  • Ooohhh, efectivamente todo tiene un orden divino, que no entendemos en el momento y después comprendemos
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