Como balance de mi gira por mi amada Latinoamérica, os dedico con cariño este post.
Llevo semanas fuera de mi hogar habitual, que está cerca de Madrid. Digo habitual porque la gente maravillosa de mi Uruguay natal, Chile, México y Miami me han hecho sentir siempre en casa.
Yo llamo hogar a todo aquel lugar en el que las personas se miran a los ojos, se dan un abrazo, conversan, ponen en común sus sueños, conflictos y anhelos.
A lo largo de este viaje, me doy cuenta de que la necesidad de amor y comunicación es universal, más allá de las diferencias culturales y sociales, del entorno del que pueda proceder cada cual, de la sensibilidad individual.
Con nuestra historia personal a cuestas, todos buscamos lo mismo: empatía, delicadeza, comprensión, amistad, amor, complicidad. Por lo que respecta al sentir, a la necesidad de amar y ser amados, todos somos de la misma religión.
¿No es una suerte tener este idioma común? Hagamos, pues, hablar al corazón.
GRACIAS POR TODO. GRACIAS A LA VIDA.
Encontraréis más reflexiones en mi web: www.marioreyesescudero.com
La próxima semana postearé en exclusiva para Retos Femeninos una reflexión que espero que os guste. Hasta pronto, un abrazo, Mario.
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