DERECHO A DISFRUTAR

Ser trabajadora dentro o fuera de casa, profesionista o no, madre de familia, hija, esposa, emprendedora o todo a la vez es una tarea ardua que podrías comenzar a valorar de ti en este preciso momento. Lo menciono porque estoy segura que hay instantes que desearías quedarte en la cama, por lo menos una hora más a descansar o a soñar; sin embargo, tu sentido de responsabilidad no te lo permite, aunque tu rendimiento sería mejor si te dieras la concesión de establecer lapsos de tiempo para ti.

Claro que, si te sucede lo que solía pasarme, imagino que de repente tendrás sentimientos encontrados porque, por una parte, quieres realizarte a nivel profesional o empresarial, pero por otra parte tus hijos, si son pequeños, necesitan de ti para forjarse, si son adolescentes también te necesitan para sentirse apoyados, si estás encargada de tu familia seguro tienes múltiples quehaceres para realizar y esta disyuntiva puede hacer que te halles en un dilema o te sientas desesperanzada ante la situación. Si a esto le sumas la idiosincrasia, aún presente, aunque a veces inconsciente, de que la mujer debe dedicarse al hogar y a la familia, los sentimientos encontrados crecen. 

Muchas veces no sabemos cómo cambiar las circunstancias que estamos viviendo y eso acarrea frustración en la vida, no obstante, lo que sí puedes hacer si lo deseas, es cambiar tu forma de manejar dichas condiciones primero reconociendo que la labor que realizas es admirable y maravillosa pues diriges, sin ser consciente de ello, una empresa desde que amanece pues atender un hogar estando sola o acompañada y además trabajar fuera de este requiere de energía, sensatez y un gran sentido de responsabilidad para realizar las ocupaciones que se necesitan y segundo, dándote palabras de aliento y de apoyo, ya que si tú no lo haces, nadie más lo hará. Verás que, con un poco de práctica, comenzarás a sentir esperanza ante las situaciones de la vida, te sentirás tranquila, vislumbrarás alternativas para resolver de forma asertiva aquello que te causa agobio y podrás empezar a considerar concederte estar un tiempo contigo.

Date cuenta que tú puedes ser tu mejor amiga y también puedes convertirte en tu mejor aliada, sólo es cuestión de que te decidas a explorar diferentes formas de pensar sobre ti misma y las labores que realizas. 

Recuerda: No se trata de ver si te lo mereces o no, simplemente es preciso que reconozcas que los espacios dedicados a ti son necesarios para tu mejor desempeño y te corresponden solo por ser Tú. 

Analízalo y tal vez como a mí, también te pueda servir.

www.rosyalcocer.com

Enviadme un correo electrónico cuando las personas hayan dejado sus comentarios –

¡Tienes que ser miembro de Retos Femeninos para agregar comentarios!

Join Retos Femeninos