El día de hoy te platicaré acerca de la personalidad histriónica. ¿Te ha tocado convivir con personas exageradas o dramáticas, que suelen hacer “panchos de todo”? Quizá viene a tu mente aquella jefa del trabajo, tu maestra, la mamá de tu novio, e inclusive tú misma ¿por qué no decirlo?. Esta personalidad que es cuando una persona busca ser el centro de atención de los demás haciendo uso del drama con la finalidad de impresionar y controlar a las personas de su alrededor.
Este trastorno de la personalidad se presenta cuando la persona tiene la necesidad de acaparar a lo demás y es porque eso le facilita su forma de relacionarse y también porque le da seguridad y refuerza su valía personal, sin embargo también manifiesta algunas conductas imprudentes, por lo que tiende a buscar la atención de manera demandante que al no obtenerla, busca la forma aunque no sea la adecuada. Por ejemplo: En una cita con el médico más que buscar el remedio a sus malestares, está buscando la forma de atraer la atención del médico con miradas provocadoras y seductoras, lleva ropa sexy o sugerente en cada consulta.
Generalmente el actuar de una persona histriónica es muy superficial en cuanto a sus emociones ya que cambian constantemente, tiende a utilizar de forma continua su físico para llamar la atención de los demás. Hace los clásicos “panchos” de situaciones que en realidad no valen la pena por lo que es exagerada en el manejo de sus emociones ya que suele dramatizar las situaciones. Por ejemplo: Una chica a quien se le enfermó su hermano a causa del dengue, por lo que el chico presenta dolores de cabeza, sin embargo, para ella significa que a su hermano ya le tienen que hacer estudios porque “puede tener hasta un tumor”. El chico al que se le enterró una uña del pie, sin embargo, su interpretación es que “ya puede tener hasta gangrena y le pueden amputar su pierna completa”, situaciones así en la que la mente de la persona histriónica suele irse más allá de una forma veloz, a la catástrofe, a lo peor, a la enfermedad, al vacío, al abandono, a la minusvalía, al “para qué vivir”. Se sugestiona muy fácilmente y eso le lleva a ser muy influenciada por los demás o inclusive por las situaciones que se presentan.
Dentro de esta personalidad histriónica puedo decirte que tanto mujeres como hombres lo padecen siendo un porcentaje más alto en el sexo femenino, y existen varios matices que te describo a continuación:
LA TEATRAL
Es aquella persona que parece modelo, llena de ropa sexy y joyas finas o exóticas que llegan a parecer árbol de navidad de tanta cosa que traen colgadas, o inclusive que esculpe su cuerpo a través del deporte, que suele exhibir su amplio intelecto o éxito económico a través de cosas por demás ostentosas y extravagantes. Siempre están acompañadas por personas o mascotas. Gesticula en demasía y dramatiza todo el tiempo.
LA INFANTIL
Es aquella persona dependiente y exigente de atención a los demás, caprichosa y suele estar buscando de forma constante la aprobación de los demás, es muy sensible y de emociones fugaces, hasta por gusto hace rabietas cuando no están de acuerdo y suele volcarse en los demás que parece ser su calcomanía, o se engancha a los demás muy fácilmente. Busca continuamente nuevas sensaciones, fantasías, todo aquello que le lleve a experimentar placer. Así como en momentos puedo estar de lo más dulce y fascinada cambia a malhumorada y tosca.
LA VIVAZ
Es aquella persona vigorosa, animada, activa e impulsiva frecuentemente, le encanta todo lo que conlleve momentos excitantes y aventuras de manera superficial, tiene una energía hipomaniaca, es atractiva, intensa, ingeniosa y desenvuelta. Suele ser una persona encantadora en sus relaciones interpersonales , ya que es muy optimista, expresiva, alegre, y espontanea, que a veces suele actuar de forma impulsiva sin pensar en consecuencias. Esta necesidad de excitación la lleva a enamorarse de manera loca y eufórica, esta de relación en relación porque suele depender de esta etapa de “enamoramiento”. También estas personas así como suelen estar llenas de energía para emprender proyectos y convencer a otros que se unan a ella también puede ser que sus ideas fluyen tan de prisa que no concretan nada, rompen promesas, se quedan sin dinero, y suelen ser personas narcisistas.
LA APACIGUADORA
Es aquella persona que tiene necesidad de calmar a los demás, intenta resolver los conflictos ajenos, es moderadora y permisiva con los otros, tiende a sacrificarse con la finalidad de recibir elogios y la aprobación de los demás. Con tal de ganarse a los demás suele halagar, alabar, y hacer sentir a los demás que es capaz de hacer por ellos cualquier cosa. Manifiesta una imagen de bondad aún a pesar de que haya diferencias con los otros. Sacrifican sus propios deseos buscando de forma disfrazada la comprensión y compasión de los demás. Son personas por demás complacientes que se pierden en el otro, con tal de tener su aprobación, y son tan buenas y encantadoras que pueden caer en sadismo.
LA TEMPESTUOSA
Es aquella persona que tiene un humor intenso y variable si hablamos de emociones, son atractivas, sociables, amigables, expresivas y buenas conversadoras. Suelen aburrirse con facilidad y también reaccionan de manera exagerada a los estímulos por lo que suelen ser un terremoto emocional. Son muy sensibles a ser criticadas, tiene poca tolerancia a la frustración y son inmaduras cuando trata de relacionarse por lo que hacen de todo un problema, tiene explosiones de ira y berrinches, seguidos de cansancio, fatiga, trastorno de sueño y alimentación. Suelen ser muy vulnerables y sus emociones son un vaivén la mayor parte del tiempo. Pierden el control muy fácilmente, se desaniman, se desesperan y se vuelven mujeres algo castrantes, celosas y envidiosas con tal de llamar la atención. Tienden a la somatización de emociones, se vuelven hipocondriacas con tal de que los demás les brinden su atención.
LA FALSA
Es aquella persona que estable relaciones con segundas intenciones, puede ser intrigante, astuta, egocéntrica, embustera y calculadora, llena de malicia. Al principio puede ser alguien que de una grata impresión, que parece sociable y honesta, su comportamiento es afectivo y espontaneo por lo que los demás se confían con facilidad. Cundo en realidad es manipuladora, rompe promesas y no conoce la lealtad, suele ser irresponsable, tiene momentos iracundos que puede llegar a la violencia física, le gustan los conflictos pero sólo por la excitación y tensión que las situaciones le producen. Para ellas el ser “buena persona” es un signo de debilidad por lo que si llegan a creer realmente en esto, su comportamiento se vuelve cruel y antisocial.
¿Te identificaste con alguno de estos matices de la personalidad histriónica? Iniciar un proceso personal mediante terapia psicológica puede ayudarte a abandonar la dependencia manipuladora, exigente y desesperada que causa problemas en tus relaciones interpersonales.
Si necesitas ayuda permíteme acompañarte.
Porque si de algo estoy segura, es que siempre se puede estar mejor.
LDH. Sandy González Guzmán.
Terapeuta Desarrollo Humano
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