¿CREES EN EL RACISMO?

Cuando pones un concepto o idea en tu mente, esta siempre va a trabajar, a tu favor o en tu contra…

 

En las últimas semanas se ha hablado mucho del racismo en los medios de comunicación, o mejor dicho se ha hablado un mucho más ya que este tema es uno de los temas del diario en California, Estados Unidos, donde vivo. Inclusive leí una carta de una periodista latina donde explicaba el arduo trabajo que tiene que hacer ella con su hija pequeña para que no sea victima del racismo, ya que su hija es de raza negra y oriental.

 

Hay tantas problemas sociales en la actualidad, como el racismo, el bullying (acoso), la violencia, las drogas, el liberalismo, y muchos otros mas, y desde mi punto de vista enfocarnos en ellos solamente están provocando el que estos problemas crezcan.

 

Cada vez que hablamos de esos problemas (como ahora yo lo estoy haciendo) más conscientes estamos de ellos y en lugar de tomar responsabilidad y trabajar en la raíz o causas del problema, simplemente nos enfocamos en quejarnos, echarle la culpa a los demás (gobierno, sociedad, educación…) y hablar más del problema.

 

Yo he aprendido que cuando ponemos un "concepto o idea" en nuestra mente, esta información SIEMPRE va a trabajar, para bien o para mal, dependiendo de la calidad de esta (buena/positiva o mala/negativa). Recuerda que no hay nada inactivo en el universo (mente). El explicarle y hablarle a nuestros hijos del racismo desde pequeños significa ponerles un nuevo concepto en su mente que tarde o temprano va a actuar a su favor o en su contra, todo depende de como tu lo hayas tratado, como problema o como algo bueno. Aunque hasta ahora, yo no he encontrado un buen concepto sobre el racismo.

 

Estoy segura que tu vocecita y la mayoría de las personas pueden decir que el racismo es real y que por lo tanto si no se lo explicamos en la casa tarde o temprano lo van a ver, especialmente si tu crees que hay algo por lo cual tus hijos se puedan ver marginados. Y quizás tienes razón. Sin embargo tus conceptos los cuales están influenciados por tus miedos y experiencias, te llevaran a contarles lo que tú crees, es decir tu realidad (la manera en que tu percibes las cosas).

 

Yo vivo en una ciudad mayormente asiática, donde el 30% son blancos y solamente el 11% somos latinos. Mi hija Daniela, de 13 años, que es una niña totalmente mexicana de piel morena jamás se ha sentido discriminada, para ella el racismo no existe. Ella jamás recibió una lección sobre el racismo de mí, aunque este es un tema del cual se habla diariamente en los medios de comunicación.

 

Mi enfoque con mi hija ha sido el de amarse, respetarse y valorarse a ella misma tal cual es y por lo tanto respetar a los demás. Y aunque yo no soy una mujer que promueve las costumbres y cultura mexicana, me siento orgullosa de ser mexicana y tengo mis valores muy bien definidos, y eso es lo que yo le he inculcado a mi hija.

 

Yo jamás me he sentido discriminada por mi color de piel, por mi acento al hablar -especialmente en ingles- por ser mujer, ni por ninguna otra razón, y tengo ya viviendo en los Estados Unidos más de 15 años y la mayoría de las veces trabajando con hombres. La discriminación empieza con uno mismo, con los conceptos erróneos que los demás nos dicen -especialmente los medios de comunicación- y que nosotros decidimos creer y aceptar como parte de nuestras vidas. Y por supuesto por el poco amor, valor y respeto que tenemos de nosotros mismos.

 

Si tu alguna vez has sido victima de cualquier tipo de discriminación eso fue debido a un concepto erróneo que alguna vez pusiste en tu mente, y al tener esa experiencia este concepto se hizo más fuerte. Esto hará que tú quieras EVITARLES a tus hijos que pasen por lo mismo y por lo tanto hablarás de esto con ellos como un PROBLEMA el cual algún día podrían enfrentar. Esto quiere decir que tú ya asumiste que ellos pasaran por lo mismo. Y es así como creamos nuestra realidad, tratando de evitar algo que desafortunadamente creamos (atraemos). 

 

No es que el racismo no sea real, por supuesto que es real cuando tú lo aceptas en tu vida y vives temeroso de ello. Es como si fueras (eres) un imán y lo atraes a tu vida. Conozco cientos de personas que viven aquí en Estados Unidos y que siempre están temerosos de que los discriminen y ¿que crees? Todo el tiempo los pasan discriminando. Y también conozco otros pocos, que aunque son indocumentados, se aman, se valoran, confían en ellos mismos, y son exitosos y viven felices (no le dan importancia ni se enfocan en el racismo) jamás nadie los ha discriminado.

 

Esto no se llama suerte como muchos creen, se llama amor, fe, responsabilidad, valor o como tu lo quieras llamar, y proviene de poner los conceptos correctos en tu mente, es decir información que te ayude a crear la vida que deseas y mereces, y no la que NO te sirve y te ayuda a crear la vida que NO deseas. En este caso una vida llena de racismo, discriminación y miedos.

 

Cuando tú no crees en el racismo, o simplemente no tienes información errónea en tu mente, jamás nadie te podrá discriminar, simplemente porque tú no crees en eso. Quizás haya alguien que lo intente, pero tu no caerás en la provocación ni le darás importancia porque no hay información en tu mente que SOSTENGA (iguale) y alimente esas palabras o actitud.

 

Yo no creo que a los hijos los tengamos que preparar para enfrentar los problemas del mundo. Yo creo fielmente que a los hijos los tenemos que enseñar a amarse, valorarse y respetarse a ellos mismos, y a que sean responsables con su vida y sus decisiones. Eso es el mejor escudo contra el racismo, bullying y cualquier otro problema social, y lo único que les puede ayudar a tomar las mejores decisiones cuando se les presente alguna de estas situaciones o problemas.

 

La mejor manera de no ser una estadística mas del racismo o la discriminación (o de cualquier otro problema social) es No creyendo en ello y poniendo información que nos sirva en nuestra mente. Enseñemos a nuestros hijos a amarse, valorarse y a respetarse a ellos mismos. Reconozcamos y hablemos diariamente de sus valores, cualidades y de la importancia de ser responsables con su vida. Y por supuesto, pongamos nosotros mismos el ejemplo, dejemos de quejarnos de todo (a ver todo como un problema), aprendamos a amarnos y a ser responsables con nuestra vida.

 

Abrazos y bendiciones,

Patricia Anaya

 

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Comentarios

  • Gracias Martha Schumacher por tomarte el tiempo de leer el articulo y tus palabras. Bendiciones ;-)

  • Hermoso concepto el amarse como una valoración que no permite abusos.
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