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Muchas mujeres sienten pánico cuando la cuarta década de su vida llega; ya sea porque es un referente mal entendido de que estamos "envejeciendo" o porque dejar atrás la juventud provoca mucha nostalgia.  

Lo cierto es que esta etapa es diferente y por ello muy hermosa; puedo decir que me siento satisfecha de estar a lado de alguien que quiero, con una vida profesional que me hace sentir orgullosa y una vida familiar que me ha enseñado a amar de verdad. 

Claro que todas las mujeres somos diferentes y este es solo mi lado de la historia, pero habrá aquellas que estarán disfrutando de otras circunstancias. Cada quien dibuja su vida a su manera. 

Aún así, todas llegamos a este punto en el que podemos ver con mayor claridad el pasado que nos respalda y es por ello que deseo que todas esas chicas que están llegando a sus treinta, tomen en cuenta estos consejos que me gustaría compartirles:

1) No minimices la importancia de aceptarte y amarte a ti misma

Ahora puedo comprender que durante mi juventud dejé pasar muchos buenos momentos por no aceptarme tal cual era. Te pido que no olvides que tu vida está para que la disfrutes a tu manera, así que debes aprender a amarte, aceptarte y respetarte. Una vez que tengas esa confianza bien construida, lo demás se irá dando de forma natural. 

2) Cuida tu exterior, pero nunca descuides tu interior

Así como ponemos tanto cuidado a nuestra imagen, también es necesario enriquecer nuestro interior. Date la oportunidad de encontrar las cosas que alimenten tu alma, que te hagan sentir tranquila, plena y preparada para enfrentar cualquier obstáculo. Ya sea a través de la espiritualidad, un pasatiempo o un oficio, debes darte tu espacio para sentirte en calma total. 

3) Aprende a pedir ayuda y a recibirla

Cuánto daño nos hacemos a nosotras mismas por pretender que podemos soportar todo por nuestra cuenta. Es verdad, tenemos la capacidad y la fortaleza para hacerlo, pero todas necesitamos el apoyo de alguien en algún momento. Mi consejo para ti es que te permitas aceptar la mano de los demás, porque es perfectamente válido sentirnos cansadas y decepcionadas de vez en cuando. 

4) Sé honesta con tus sentimientos

Deja atrás la costumbre de llevar siempre una máscara para ocultar tus verdaderos sentimientos. Se honesta contigo y con los demás, aunque algunos te juzguen, habrá otros que te acepten. Di lo que piensas, haz lo que sientas y ama cuando quieras hacerlo, no te reprimas absolutamente nada, aprende a vivir libremente porque después te darás cuenta que ya es tarde para recuperar el tiempo perdido. 

5) Preocúpate menos

¡Te lo digo de verdad! Deja de darle vuelta a los asuntos que no valen verdaderamente la pena, que solo te roban luz y energía. Deja de sentir angustia por cosas que están fuera de tu alcance y mejor trabaja en lo que sí puedes resolver. Libérate de tu pasado, vive tu presente y piensa en tu futuro, pero no te quedes atada a ninguno de los tres; recuerda que el tiempo avanza y tú también deberías hacerlo. 

6) Viaja cada vez que puedas

Estás en el mejor momento para cumplir tu lista de cosas por hacer. Es la edad perfecta para viajar a ese lugar que siempre soñaste o para irte con tus amigos en un viaje grupal. No importa a donde o qué tan lejos, lo importante es regalarte ese momento que se quedará contigo para siempre. Después las cosas cambian radicalmente y no quiere decir que sea malo, pero será diferente.

7) Elige un trabajo que te haga sentir bien

Un día te darás cuenta que has pasado 15 años en un trabajo que nunca te gustó, pero que conservaste porque era seguro y cómodo. Descubre qué es lo que te apasiona y qué es en lo que mejor te desempeñas y vive para ello y por ello. Trabajar es una forma digna de vivir nuestra vida y es algo a lo que le dedicamos muchas horas de nuestro tiempo, no permitas que sea una razón de angustia y malestar, sino de crecimiento y satisfacción. 

8) Cultiva el buen hábito del ahorro

Nunca sabemos lo que puede esperarnos en el futuro y lo mejor es ir reservando un ahorro que nos pueda sacar de un apuro. A veces es difícil ahorrar pero no tienes por qué sacrificar grandes cifras, puedes hacerlo de poco a poco y cuando menos lo pienses habrás reunido una buena cantidad para invertir en lo que más te convenga. 

9) No dejes que el "matrimonio" y los "hijos" sean un tema que te presione

Cada quien avanza a su ritmo y toma las decisiones que mejor le parecen, cuando lo considera adecuado. No te sientas presionada por tu edad o porque tus amigas y conocidas ya tienen hijos o esposo. Tomar decisiones de forma apresurada te lleva a los arrepentimientos y las comparaciones te hacen sentir ansiosa y menospreciada, así que no lo permitas. 

10) Acepta los cambios de la vida

Creo que este es el punto más importante. Las personas siempre sufrimos porque rechazamos los cambios o pensamos que viviremos de la misma manera para toda la vida. Creo que pensar así es poco realista y además poco conveniente, pues cuando tenemos que enfrentar cambios que no pueden ser evitados, nos sentimos fuera de control. Lo mejor que puedes hacer en este momento es aceptar que tu vida estará sujeta a modificaciones de todo tipo: amores que llegan y se van, trabajos buenos y malos, enfermedades, alegrías, incluso la muerte. 

En fin, la vida está llena de estos cambios de los cuales debemos tomar lo mejor que podamos. 

Una vez que llegues a los 40 y eches un vistazo hacia atrás verás que tu vida fue mejor de lo que pensabas en su momento. Que las cosas que creíste eran demasiado dolorosas o difíciles de superar, ya pasaron y que ahora eres una mujer mucho más fuerte y más sabia.