HE AQUÍ UNA VISION CIENTIFICA QUE PUEDE LLEVARNOS A REFLEXIONAR SOBRE LA IMPORTANCIA DE TRABAJAR EN TODAS LAS AREAS EN LAS QUE NOS DESEMPEÑAMOS CON CONSCIENCIA. DURANTE LOS ULTIMOS MESES SOLO RECIBO MEMES Y NOTICIAS QUE ENTIENDO NOS HACEN ACTUAR DESDE EL TEMOR O EL ENOJO. AMBOS PUNTOS DE PARTIDA NOS IMPIDEN PENSAR Y ACTUAR CON CLARIDAD Y TOMAR LAS MEJORES DESICIONES PARA HACER DEL MUNDO UN SITIO MEJOR
DE LA CIENCIA DE LA INTERCONECTIVIDAD, PUBLIADO POR
Rolling McCraty PhD and Ann Deyhle PhD. (traducido por su servidora)
SOBRE AUTO-REGULACIÓN Y COHERENCIA SOCIAL Y GOLOBAL
Cuando los miembros de cualquier grupo de trabajo, equipo deportivo, familia u organización social se llevan bien, existe una tendencia natural a una buena comunicación, cooperación y eficiencia. La coherencia social o grupal se refiere a la alineación y al orden armonioso en la red de relaciones entre individuos que comparten intereses y objetivos comunes.
Cuando los individuos no están bien auto-regulados o están actuando desde su propio interés sin tener en cuenta a los demás, se genera incoherencia social. Se ha hecho evidente que la incoherencia social no solo influye en la forma en que nos sentimos, nos relacionamos y nos comunicamos entre nosotros, sino que también afecta los procesos fisiológicos que afectan directamente a la salud.
La clave para crear grupos estables y coherentes está relacionada con establecer emociones positivas y disipar las tensiones emocionales negativas, los conflictos interpersonales y otros factores de estrés entre los individuos en un grupo .
La coherencia colectiva se construye al trabajar primero a nivel individual. A medida que los individuos se vuelven más capaces de autogestionarse, el grupo aumenta su coherencia colectiva y puede lograr sus objetivos de manera más efectiva.
La coherencia global acelerará en gran medida la cooperación, la colaboración, la resolución innovadora de problemas y el discernimiento intuitivo para abordar los importantes problemas sociales, ambientales y económicos de la sociedad. Esto se hará cada vez más evidente a medida que los países adopten una visión planetaria más coherente e inclusiva. Esta visión planetaria será fundamental para abordar de manera significativa y exitosa la opresión social y económica, las guerras, la intolerancia cultural, el crimen y la indiferencia por el medio ambiente.
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