La integridad, como cualidad personal, es simple y llanamente el conjunto de aptitudes que poseemos. Una persona íntegra se mueve y vivifica las distintas áreas del conocimiento, es íntegra aquella que siempre hace lo correcto, es decir hacer todo aquello que consideramos bien para nosotros y que no afecte los intereses de las demás personas. INTEGRIDAD proviene del latín integrîtas (totalidad, virginidad, robustez y buen estado físico), pero el vocablo como tal significa intacto, entero, no tocado. Integridad se traduce como honrado, honesto, respeto por los demás , directo, apropiado, responsable, con control emocional, respeto a sí mismo, puntualidad, lealtad, pulcro, disciplinado y firmeza en sus acciones. Guauuuu!! En general es alguien en quien se puede confiar, hacer lo correcto, por las razones correctas, del modo correcto, en el tiempo correcto y con las personas correctas.
Si pensamos en una analogía que, por cierto son mis favoritas, ubiquemos al león que con esa gallardía que le caracteriza, nos impone con su hermoso andar que es sinónimo de seguridad y fuerza frente a los demás y JAMÁS retrocede.
Nosotros como seres humanos SIEMPRE debemos caminar y conducirnos con seguridad y rectitud, confiados y sabiendo que, quien siga nuestros pasos sentirá serenidad al ver paso firmes y ejemplares.
Debemos caminar por el camino de la FE que, es sin lugar a dudas la única opción en nuestra vida de inquietudes, teniendo la certeza de que nos mantendremos de pie ante cualquier adversidad.
Caminemos con determinación, enfrentándonos cautelosos y manejando nuestros miedos ante las situaciones difíciles, inesperadas o peligrosas.
Te comparto una historia…
Durante enero de 1982 se disputó en el Madison Square Garden de Nueva York una semifinal de un torneo de tenis donde jugaron los dos mejores tenistas clasificados a ese momento “Vitas Gerulaitis y Eliot Teltscher”. Cada uno de ellos había ganado dos sets y estaban jugando la definición del quinto set. Gerulaitis se puso match point y en un feroz peloteo logró pasar la pelota rozando la red cayendo a unos centímetros en lo que parecía un punto seguro.
Para sorpresa de todos Teltscher corrió y alcanzó a golpear la pelota antes del segundo pique, pasando a Gerulaitis e igualando el marcador.
El público enloqueció por la calidad del tanto y se entusiasmo de ver más tenis, sorpresivamente, Eliot Teltscher le indicó al juez que había tocado la red “antirreglamentariamente” perdiendo el punto y el partido. A Eliot Teltscher no le importó que el árbitro no hubiera visto la infracción, no le importó el dinero en juego, ni la satisfacción del público. Nada de eso cambiaba las reglas del juego.
Él eligió honrar sus principios. Saludo a su contrincante, al público y se fue con la cabeza bien alta… digno ejemplo de CAMINAR DE LA MANO DE LA INTEGRIDAD, ¿no te parece?
Te invito a vivir la integridad como tu fiel compañera a imagen y semejanza de Dios nuestro Señor que como León de Judá, venció. Imitemos sus atributos, su hermoso y firme andar, su fuerza invencible y sobre todo, que jamás dio marcha atrás aun a pesar de las adversidades e injusticias de la vida.
Hasta el próximo martes.
Comentarios
Gracias!!!!
Ara, muchas gracias por recordarnos lo importante de la palabra "integridad", es muy cierto, que a veces por no quedar mal cubrimos con mentiras nuestros errores, gracias por recordarme que ante todo la honestidad y justicia debe existir en mi vida. Dios siga usandote para bendición de nosotros. Un saludo y un fuerte abrazo
gracias Araceli, pues realmente la integridad para mi es el respeto que sientes hacia los demàs sin faltarte al respeto a tì mismo, la congruencia con, el pensar, decir , hacer pero ahora gracias a tu enseñanza puedo agregar que es la honestidad hacia los demàs y por ende a ti Felices Pascuas .