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Por Claudia Montelongo

Para Fabulosa Magazine.

No voy a mentir, adoro de sobremanera escuchar esa frase… ¡Es más! Me declaro culpable tratar de llevar la conversación hasta este punto, sin embargo no siempre sucede y cada vez con menor regularidad… Y cuando no logro conseguirlo seguramente comeré una dosis de chocolate extra, llegaré corriendo a mi casa a exfoliar mi rostro, romperé 4 capsulas de Vitamina E, las aplicaré por mi cara y cuello y recitaré algún mantra de la eterna juventud. ¡Lo que sea! Con la esperanza de volver a escuchar estas mágicas palabras, por eso en este número hablaremos de la juventud a los 40

Digamos que es cuestión de enfoques. Mi mamá me repite que estoy muy joven, pero no les diré lo que opina mi sobrina de 8 años. (No insistan, ¡No les diré!).  Sin embargo entre las responsabilidades de la casa, el trabajo, la maternidad etc.  a los 30 me sentía de 40… y a los 40… me siento como me sentía a los 30 :P. 

Y todo porque los 40 es una paradoja, muchas vivirán una segunda adolescencia tratando de disfrutar los últimos rastros de juventud que les queden; otras serán señoras serias sintiéndose como que el tiempo se les vino encima, esperando pacientemente el primer llamado de la osteoporosis o el alzhéimer y unas pocas entenderán que los 40 es un regalo de experiencia, madurez, donde aún estás joven y de “buen ver” ¡Que más puedes pedir!

Pero tampoco se trata de dormirte en tus laureles, hay que tomar conciencia que a esta edad hay cuidados que debemos extremar, por eso de entre los 1748956 artículos que he leído para parecer más joven y escuchar de nuevo esas palabras que son música para mis oídos, les transcribo una selección de lo que me ha parecido más útil ;)

Lista básica de acciones para ser una diva de 40 que parezca de 30 y tantos.

• Cremas para la piel que contengan uno o más de los siguientes ingredientes: coenzima Q10, la coenzima R y las vitaminas A y E
• ¡Evita las manchas!¡Usa bloqueador solar! (ojalá le hubiera hecho caso a mi madre)
• Cual diezmo, destina mensualmente una cantidad para tratamientos de belleza.
• Si jamás te has hecho un estudio de imagen, es el mejor momento para hacerlo. Deja de confiar en tus amigas y contrata a un asesor que te diga que colores, estilos y formas de ropa y maquillaje se adecuan a ti. Te sorprenderás del cambio.
• Cuida tu peinado. ¡imprescindible! Un buen corte, color y tiñe tus canas. ¿Cabello largo? ¡Claro!  Pero lindo, bien cuidado y bien acomodado.
• El maquillaje tiene un papel fundamental: aléjate de los colores demasiado brillantes o sombras tornasoladas. Respeta la regla de enfatizar sólo ojos o sólo labios. La base debe ser liquida (los polvos compactos no son para ti), utiliza rubor en crema
• Religiosamente retira el maquillaje por las noches, sin excusa ni pretexto.
• Cuida tu peso (¡ouch! me mordí la lengua), más de 10 kilos arriba te aportan visiblemente más años.
• Evita para siempre los tonos pastel…. Ni en tu pastel de 40… (mmh por si acaso, también evita el pastel)
• Define tus áreas. Marca tu cintura y usa un buen sostén. ¡arriba esos ánimos!
• Siempre usa accesorios de buena calidad, a esta edad marcan la diferencia.
• No ocultes tus atributos. A los 40 es mejor contornear que mostrar, la ropa siempre debe insinuar tus curvas, ni demasiado ceñido pero tampoco muy holgado. Muestra tus piernas, obvio no utilizaras una microfalda elástica pero las faldas de tubo un poquito arriba de las rodillas te harán lucir sensual y muy elegante.
• No caigas en la trampa de la fodonguez. Elige zapatos lindos, no sólo cómodos. (Hooooola Claudia)

En resumen, a los 40 estás en tu mejor época (solo si así lo quieres ver). 40 es solo tu edad cronológica, pero ¡La juventud es movimiento! Rie, baila, canta, diviértete, disfruta de tu cuerpo y de tu mente. Aprovecha tu experiencia, “sácate partido”, pero sobretodo ¡vive fabulosamente tus “nuevos treinta”!